Han pasado nada más y
nada menos que 13 años desde que nuestra querida Dory recordase por primera vez
la dirección a la que había ido a parar el protagonista de la divertidísima
“Buscando a Nemo”. Trece años durante los cuales ha continuado haciendo caso a
su mantra de “sigue nadando, sigue nadando” entre las corrientes de la vida.
La verdad es que los
miembros de este equipo habíamos empatizado tanto con nuestra pequeña pez
cirujano azul, que habíamos olvidado el hecho de que habían transcurrido ya trece
años desde que la conocimos, por tanto, cuando descubrimos que la gente de
Pixar se iban a lanzar con una secuela de “Buscando a Nemo” protagonizada por
Dory nos temimos lo peor, por lo que decidimos ir a verla directamente el fin
de semana de su estreno. Y eso hicimos el pasado sábado, acomodándonos en
nuestras butacas dispuestos a descubrir hasta donde llegaría el pez que rescató
a Nemo de la ya famosa dirección “P. Sherman, Calle Wallabi 42, Sidney”.
La historia se sitúa exactamente
un año después del regreso de su aventura por las aguas de Sidney de Dory,
Marlin y Nemo al arrecife donde tienen su anémona estos dos últimos.
Allí, Dory empieza a
tener extraños sueños donde, a modo de flash-back, ve imágenes de una pequeña
pez azul jugando a colocar conchas, imágenes que evidentemente olvida, hasta
que un día después de susurrar en sueños “la Joya de Morro Bay, California”
reconoce a la pequeña que juega con las conchas. Efectivamente, es ella, en su
casa con sus padres, Jenny y Charlie.
Presa de la excitación,
decide lanzarse al encuentro de sus padres, contando, eso sí, con la ayuda de
Marlín y Nemo. Después de dudarlo un poco, los tres se lanzan a la corriente
oceánica para llegar a su destino “la Joya de Morro Bay”, o como su nombre
realmente indica “Instituto de Vida Marina”, un centro de recuperación de fauna
donde, sin tan siquiera pretenderlo, nuestra Dory acaba internada en el módulo
de cuarentena.
A partir de este momento,
y mientras Marlín y Nemo luchan por entrar en el instituto, nuestra olvidadiza
Dory hará buenas migas con Hank, un pulpo rojo con complejo de Mortadelo y un
instinto innato por huir, quien le ayudará en su objetivo de localizar a sus
padres, cruzando de sala en sala todo el instituto y reconociendo poco a poco a
unos cuantos de sus amigos de la infancia, como Destiny, la ballena con quien
nuestra protagonista aprendió a hablar balleno, y Bailey, una ballena beluga
que cree haber perdido sus habilidades de geolocalización.
Entre todos vivirán un
buen número de aventuras que les llevarán a un desenlace que, evidentemente, no
descubriréis aquí. Lo que sí descubriréis es nuestra particular valoración
sobre “Buscando a Dory”, la producción número 17 de la gente de Pixar.
Después del pequeño
fracaso comercial que supuso “El viaje de Arlo”, los estudios Pixar han vuelto
un poco a sus orígenes, desarrollando una historia repleta de humor fino,
buenas enseñanzas y que cuenta con unos personajes que mantienen la magia y el
cariño que a muchos nos enamoraron hace ya trece años.
Argumentalmente parece
que los responsables de “Buscando a Dory” han querido enfatizar al máximo el
lado más emotivo y tierno de la historia con esa pequeña Dory de grandes ojos
asumiendo que tiene problemas de memoria a corto plazo, nadando
desesperadamente en busca de ayuda mientras supera uno tras otro los hándicaps
que la aventura le va deparando en detrimento del propio argumento de la cinta,
lo que acaba penalizando un poco el desarrollo de la misma.
La verdad es que hemos
echado un poco de menos el protagonismo que tenían Marlín, Nemo y la propia
Dory con sus píldoras de humor en la primera cinta, ya que en esta aventura
ceden gran parte de su protagonismo a Destiny, Bailey y a Hank, los nuevos personajes
de esta segunda parte.
Con todo os tenemos que
decir que, aunque no se trate de una de esas perlas con las que de vez en
cuando nos deleita Pixar, “Buscando a Dory” nos ha gustado mucho, por lo que os
la recomendamos totalmente. Nuestra nota final es de un 7.5 sobre 10.
Título original: "Finding Dory" - USA - 2016
Dirigida por: Andrew Stanton, Angus MacLane
Duración: 103 minutos
Género: Animación
Título original: "Finding Dory" - USA - 2016
Dirigida por: Andrew Stanton, Angus MacLane
Duración: 103 minutos
Género: Animación