#Chef

No os vamos a engañar, después de nuestra última incursión fallida en el cine para ver la nefasta “SexTape. Algo pasa en la nube”, ya teníamos ganas de volver a disfrutar de una buena sesión de cine, por lo que, cuando vimos el anuncio del estreno de “#Chef” decidimos que, esa era nuestra opción para resarcirnos de nuestra última experiencia.

Éramos conscientes de que, en ningún caso, “#Chef” sería una gran obra maestra, pero visto el tráiler, nos pareció una idea original, bien rodeada de caras conocidas, así que, sin pensarlo mucho, hicimos acopio de palomitas, refresco y entradas, y nos fuimos directos a la sala.

La historia empieza presentándonos a Carl Casper (interpretado por Jon Favreau) un reputado chef que vive por y para la cocina. Carl gestiona y lleva la cocina de un conocido restaurante de Riva (Dustin Hoffman) con gran éxito hasta que Ramsey Michel, un prestigioso crítico, se cruza en su camino.

Ansioso por gustar y recibir una buena crítica, prepara un nuevo y ambicioso menú que tiene que dejar de lado por qué Riva no le deja innovar en una noche tan especial, lo que le obligará a ceñirse al menú de siempre. El resultado de la crítica es funesto para Carl, recibiendo palos por todos lados.

Tomado por la rabia, descubre Twitter mientras está con su hijo Percy, lo cual, lejos de tranquilizarle, le catapulta a una vorágine de mensajes y a un enfrentamiento con Ramsey que acabará desembocando en su salida del restaurante.

Lo que para muchos hubiese podido ser un hundimiento personal, para Carl representa una nueva oportunidad, llegada de la mano de Inez (Sofía Vergara), su ex mujer y madre de Percy.

El #Chef con el pequeño Percy y su ex, Inez

Dicha oportunidad pasa por hacerse cargo de un camión de cocina ambulante, ayudado, eso sí, por su amigo Martin y su hijo Percy, un auténtico crack de Twitter y las redes sociales, las que a la postre tendrán mucho que ver en el desenlace final de la historia, aunque, como ya os podéis imaginar, desde aquí no os lo vamos a contar.

Lo que sí os contaremos es nuestra particular valoración sobre “#Chef”, una cinta que nos ha sorprendido positivamente aportando originalidad y frescura a una cartelera repleta de segundas partes, súper héroes de segunda y cintas de tercera regional.

No os vamos a negar que, después de una temporada repleta de cocinas y cocineros en nuestras pantallas, ver “#Chef” fue para nosotros una auténtica prueba de fuego, ya que, aunque por momento parecía que estábamos ante un capítulo de “Top Chef” (los primeros 20 minutos), pronto la historia gira en torno a un más que interesante viaje en busca de los orígenes de Carl.

Interpretativamente el gran peso de la cinta lo lleva el propio Jon Favreau, creando un personaje complejo que se va desgranando y abriendo con el paso de los minutos y con el que uno, puede llegar a identificarse sin demasiados problemas. En cuanto al resto de personajes, aunque secundarios, nos gustaría resaltar especialmente el del pequeño Percy (Emjay Anthony) y el de John Leguizamo (quien pone a cara a Martin, el amigo de Casper).

Como os hemos dicho, no estamos ante una obra maestra, ni ante una película inolvidable, aunque sin lugar a dudas, esta “#Chef” ha sido una de las opciones más frescas, sencillas y agradables que hemos tenido en nuestras carteleras este verano, por tanto, nuestra valoración final es de un 7.5 sobre 10.

Título original: “Chef” – 2014 – USA

Dirigida por: Jon Favreau

Duración 115 minutos

Género: Comedia

Sex Tape. Algo pasa en la nube.

Mucha gente cree que hacer una comedia es la cosa más sencilla del mundo, pero no es así, ya que, como se acostumbra a decir, es más fácil hacer llorar que hacer reír. En este caso, los del equipo desoímos nuestras vocecitas internas y optamos por “Sex Tape” por un motivo, Cameron Díaz.

No es que Cameron sea una actriz fetiche para nosotros, pero sí os diremos que nos hemos reído bastante con algunas de sus comedias, como por ejemplo: “Bad Teacher” o  “La cosa más dulce”.

Ya veis que era fácil superar el listón y hacernos pasar un buen rato, pero no, ya os avanzamos que nos llevamos una decepción mayúscula.

La historia empieza presentándonos a Annie (Cameron Díaz), una bloguera de éxito que se dedica a escribir para madres. En el post que está escribiendo, nos cuenta de forma ciertamente original, la evolución que ha sufrido la relación con su marido Jay (Jason Segel).

Cuando Jay y Annie se conocieron, entre ellos no sólo surgió la chispa, sino también un deseo sexual difícilmente aplacable, provocando, entre ellos, que la química y las hormonas explotaran sin contemplaciones, estuvieran donde estuvieran.

Diez años después, y con dos pequeños en casa, la llama del sexo se ha extinguido por completo, por lo que deciden intentar recuperarla. Para hacerlo, no se les ocurre nada mejor que grabarse en vídeo mientras tienen una maratoniana sesión de sexo de casi tres horas, probando todas y cada una de las posturas de un famoso manual de sexo.

Cómo ya os podéis imaginar, el vídeo en cuestión acaba distribuido por todos los equipos que han ido regalando (sí, la pareja es muy generosa, regalando tabletas a amigos y conocidos). Presos del pánico, Jay y Annie empiezan a buscar las tabletas que han regalado para borrar el famoso vídeo… sus amigos Robby y Tess, el nuevo jefe de Annie, el cartero, etc.

Poco a poco, peripecia a peripecia, la pareja protagonista va borrando sus vídeos, hasta que se enteran que una copia de la cinta, va camino de un famoso portal porno, y, como os decimos siempre: “hasta aquí os podemos contar”.

Argumentalmente la historia es actual y potente (¿a quién no se le ha ido nunca una foto ‘no deseada’ a la nube, o ha hecho una videollamada ?), y los gags del tráiler divertidos, pero realmente, bajo nuestro punto de vista se queda en eso, en cuatro gags.

Jay y Annie, a punto de grabarse 

Para los del equipo, lo peor de “Sex Tape” es la extraña combinación de una buena idea tirada a la basura por un soporífero ritmo de narración al servicio de lo que parece una campaña comercial de “Apple”, ya que si no se nombra 25 veces el nombre de “iPad” a lo largo de los 94 minutos de metraje, juntamente con otros como “Siri”, no lo hace ninguna, vaya, que les ha faltado añadir un anuncio para comprar online los productos de Apple. 

A todo esto debemos añadir la presencia de una Cameron Díaz lejos de sus registros habituales, y un Jason Segel que, según nos pareció, simplemente pasaba por allí. De hecho, aún nos preguntamos cuál era su cometido en “Sex Tape”.

No podemos dejar de mencionar lo decepcionante que resulta el hecho de ir a ver una comedia y encontrarnos con algo que no se le parece en absoluto, que no te produce risas y que, incluso, parece animarte en algunos momentos a que abandones la sala. De hecho, no entendemos cómo un guión así ha sido aceptado por actores de sobra conocidos en Hollywood, ya que, a nuestro parecer, hubiese necesitado unos cuantos ajustes antes de llegar a la fase de grabación.

Con todo, no os recomendamos que vayáis a ver “Sex Tape” al cine, siendo la nota resultante de 3 puntos sobre 10.

Título original: “Sex Tape” – USA – 2014

Dirigida por: Jake Kasdan

Duración: 94 minutos

Género: Comedia