Ha pasado más de un año
desde que tuvimos noticias del estreno de uno de los nuevos ‘Clásicos Disney’,
el número 56 para ser exactos. A pesar de esta catalogación, para este equipo,
esta cinta estará siempre presente en nuestra memoria, aunque quizá, no tanto
por la calidad de la misma, si no porqué durante nuestro viaje a Estados Unidos
estaba en pleno apogeo en sus carteleras. Aunque eso sí, con un título distinto
al que se tuvo cuando se estrenó en nuestro país, “Moana”.
En España y otros
países de Europa, por estar registrado por una empresa, llegó a nuestra
cartelera finales de 2016 con el título de “Vaiana” aunque los miembros de este
equipo, al final la hemos visto hace unos días desde la comodidad de nuestro
sofá.
“Vaiana” nos traslada
directamente a una pequeña y tranquila isla tropical, en una época indeterminada (posiblemente
unos 2000 años antes de nuestra época). En la isla nos encontramos con la
pequeña Vaiana, una niña que vive obsesionada con el mar y poder navegar más allá
del arrecife que rodea la isla mientras que su padre, el jefe de la tribu,
trata de impedir a toda costa que la pequeña se haga a la mar.
Con el paso de los
años, en la pequeña isla se empiezan a notar los primeros síntomas del
cumplimiento de una viaje leyenda. Dicha leyenda cuenta que unos mil años atrás,
un semidiós llamado Maui robó, por codicia, el corazón de la todopoderosa diosa
Te Fiti condenando así a la desaparición paulatina de la vida en todas las
islas bajo su influencia.
Aunque el padre de
Vaiana y por extensión el resto de la tribu no quieren creer dicha leyenda, la
aparición de unos cocos negros junto con la confirmación de que los cultivos han
dejado de crecer y finalmente, el agotamiento de la pesca en la zona del
arrecife, dejan a la pequeña comunidad de Vaiana al borde del abismo, ya que
sólo tienen dos opciones: desaparecer o buscar una nueva isla a la que
desplazarse.
Ante tal disyuntiva,
Vaiana toma la determinación de llevar a cabo su sueño y hacerse a la mar para
encontrar, primero de todo al semidiós Maui y después con él, devolver el
corazón de la diosa Te Fiti para romper la maldición que pesa sobre las islas
de la zona.
El primer punto lo
consigue rápido, ya que sin demasiado esfuerzo da con Maui. Convencerle ya le
costará un poco más, y devolver el corazón a la diosa… ejem… para eso ya necesitará
toda su fuerza, su convicción, el poder de Maui y la ayuda del propio océano,
aunque como ya os podéis imaginar, en este rincón y aunque se trate de una
película de Disney, no sabréis si finalmente Vaiana consigue su objetivo o no.
Por todo el mundo es
conocido que la mayoría de películas de Disney siguen un mismo patrón, el de
“princesa y/o heredera de un imperio debe correr un sinfín de aventuras para
encontrar su príncipe azul”, en esta ocasión el gigante californiano ha
intentado una modernización de dicho patrón, ya que, aunque Vaiana es la hija
del líder de una tribu de la polinesia, esta no sale en busca de su amor, sino
que, con total valentía se enfrenta a su padre para hacerse a la mar y buscarse
a sí misma mientras intenta salvar su mundo de la desaparición. Sin lugar a
dudas, un buen intento, aunque para este equipo, como ya pasó con “Brave
(Indomable)” se queda un poco en eso, en un intento.
En cuanto a los
personajes principales de “Vaiana”, hay que reconocerle a Disney el buen
trabajo de modernización que han llevado a cabo con el quiebro de la imagen
típica de sus princesitas dando paso a la vez, a una joven guerrera que se
aleja del feminismo tan rápido como su barca se aleja de su isla. Por otro
lado, el personaje masculino también tiene una buena evolución, pasando de
héroe torpón y machista a cómplice total de la joven lideresa, algo que hasta
ahora, se había visto en pocas ocasiones.
De todas formas, el
salto más grande que da “Vaiana” frente a sus antecesoras en la factoría Disney
está en el apartado técnico, notándose y mucho la mano del equipo técnico de
Pixar.
Con todo, para este
equipo, y aunque no consideramos que “Vaiana” sea un fracaso, sí que os decimos
que nos dejó un poco fríos. Y es que, aunque cuenta con una buena BSO y,
comparándola con otras producciones similares, técnicamente es un paso
adelante, para nosotros “Vaiana” tiene un desarrollo demasiado previsible, pecando
de buscar en exceso la broma fácil sin acabar de conseguirla.
Pese a todo lo que os
hemos contado, nosotros os la recomendamos, pues entretiene, y eso ya es un
mérito. Nuestra nota final es de un 6 sobre 10.
Título original:
“Moana” – 2016 – USA
Dirigida por: Jon
Musker, Ron Clements
Duración: 113 minutos
Género: Animación,
Clásico Disney
Felicitaciones por el blog y por la reseña en primer lugar. Efectivamente lo primero que llama la atención de la película es el título otorgado en Europa al parecer por el registro de una marca de perfumes. En cualquier caso Vaiana o Moana aportando elementos novedosos en cuanto a la imagen de la princesa en unas formas físicas más actualizadas o ciertos toque feministas. En cualquier caso me decepcionó como película. Este año con Coco me quite esa espina, me pareció completamente maravillosa.
ResponderEliminarSaludos y buena semana.
Muchas gracias Miguel por el comentario :) En cuanto a la película, totalmente de acuerdo, y con lo de "Coco" también, aunque no esperaba menos de un original de Pixar :)
EliminarSaludos!