martes, 26 de enero de 2010

El show de Truman

El show de Truman - Cartel
Actualmente, si alguien se pone a pensar en un conjunto de cámaras siguiendo a un individuo a todas horas con el único objetivo de satisfacer el morbo ajeno (algunos a esto le llamaban “experimento sociológico”), la imagen que le llega es inmediata: Mercedes Milá disfrazada de fruta (o verdura) mientras nos enseña el delfín de Arturo, las lágrimas de Indhira o el edredoning de Arturo con cualquier chica que se deje. O sea: “Gran Hermano”.

Aunque encaja totalmente en su filosofía de televisión, el inventor de esto no es Telecinco, ni mucho menos. Todo nació de la imaginación de George Orwell (en su obra “1984”) a finales de la década de los 40 del pasado siglo, y adaptada antes para el cine que para la televisión en 1998, en “El show de Truman”, y precisamente de esta adaptación os queremos hablar hoy.

Hacía mucho tiempo que decíamos que deberíamos verla conjuntamente, pero la saturación del tema “Gran hermano”, y la poca simpatía que despierta Jim Carrey y sus gestos y tics en parte de los miembros del equipo, habían dejado siempre aparcada esta cinta en un segundo plano hasta estas pasadas navidades, cuando le dimos una oportunidad.

Sentados en el sofá, y con “El show de Truman” en pantalla, poco a poco fuimos descubriendo la anodina vida de Truman Burbank (Jim Carrey), en su idílica ciudad. Despertar, de la casa al trabajo, el periódico, las ventas, la comida, la vuelta a casa, su ‘amiga’,... Todo parece idílico, sin sobresaltos como si su vida fuera una película de Disney.

Poco a poco, y gracias al descubrimiento de lo que es el amor auténtico, nuestro protagonista se va dando cuenta de que todo lo que le rodea, está plagado de pequeños fallos y que todo parece orientado a él consiga sus objetivos: atascos que se desvanecen al acercarse, o que se producen cuando quiere salir en persecución de alguien que le puede aportar luz a su vida... vaya como si un Gran Hermano conspirara con y contra él.

Truman no está equivocado, ya que esa es la trama principal de “El show de Truman”, mostrar su vida al gran público, y es que él sin saberlo, es el indiscutible protagonista de un macro programa de televisión que emite su vida 24 horas al día. Él es su propio personaje, o su personaje es su vida, como queráis verlo, ya que toda su vida ha transcurrido y transcurre en el plató de “El show de Truman”.

Triste ¿verdad? Para nosotros sí, y más sabiendo o sospechando que si técnica y legalmente se pudiera, los responsables de Telecinco ya hubiesen copiado ese show, y ya tendríamos a una persona viviendo una vida que no existe.

Para nosotros, y sin lugar a dudas, lo más destacable de esta película, y que casi le convierten en un nuevo clásico, es la genial interpretación que hace Jim Carrey, en las antípodas de lo que nos tiene acostumbrados (por suerte).

En cuanto a valoración global, pues para J, un 7.5, para el otro J del equipo un 7, así que le pondremos globalmente un 7.25.






Título original: “The Truman Show” – USA – 1998
Dirigida por: Peter Weir
Género: Comedia
Duración: 102 minutos
miércoles, 20 de enero de 2010

Julie y Julia

Julie y Julia - Cartel
Bueno, para decir la verdad, estamos en una de esas situaciones en que resulta complicado dar una respuesta a la pregunta de “¿Por qué lo habéis hecho?” Más que nada, porqué no estábamos al corriente del argumento y sabíamos nada de ella.

La única cosa que sabíamos es que estaba protagonizada por Meryl Streep, una de nuestras actrices preferidas de los últimos tiempos. Suponemos que esta fue la auténtica razón de peso por la que, al final, y después de ver un tráiler algo desalentador, decidimos ver “Julie y Julia” el pasado mes de diciembre. Por cierto, y que conste en acta: No nos arrepentimos.

“Julie y Julia” nos narra la historia de dos mujeres con una pasión común, los fogones y las cocinas, aunque eso sí, vividas de dos formas y en dos épocas claramente distintas.

La historia de Julia (Meryl Streep), trascurre en el París de los años 50 al poco de llegar a la capital parisina acompañando a su marido. Como el aburrimiento hace mella en la buena de Julia, decide, enfrentándose a todas las reglas escritas, entrar en el machista mundo de la alta cocina francesa, y llegando al extremo de conseguir crear escuela a través de la edición de un libro con 524 recetas (“Dominando el Arte de la Cocina Francesa”).

Varias décadas más tarde, en Estados Unidos, Julie (Amy Adams), agobiada y aburrida en su día a día, decide dar un nuevo impulso a su vida aprovechándose de la tecnología informática y de los conocimientos de Julia. Sí, Julie se marca un claro reto: durante un año, hará cada día una de las recetas incluidas en “Dominando el Arte de la Cocina Francesa”, y la publicará en un nuevo blog. Todo ello, con el apoyo de su marido.

Bien, como podéis ver, una película sin estridencias en su argumento, y que, en un principio, puede llevarnos a pensar que no está bien hecha o que no cuenta con calidad suficiente. Pues bien, si bien es cierto que esta película no es la mejor que hayamos visto últimamente, sí que le debemos reconocer diversos méritos. Por ejemplo, resulta especialmente destacable lo bien combinadas que están ambas historias, puesto que los saltos que se realizan no resultan traumáticos, dejando claro al espectador no sólo que se trata de dos historias diferentes, sino también vividas en épocas totalmente opuestas.

Resulta también destacable la calidad interpretativa de las dos protagonistas, ya que tanto Meryl Streep como Amy Adams se pusieron en la piel del personaje adecuadamente. No obstante, en el caso de la primera, consideramos que su interpretación (a pesar de ser buena) está por debajo de la efectuada en otras películas suyas, hecho por el cual no consideramos que, en esta ocasión, sea justa ganadora del Globo de Oro por esta interpretación.

En lo negativo, debemos destacar que en ocasiones la película presenta cierta falta de dinamismo, hecho, en parte, justificado por la narración que esta realiza de dos historias. Junto con ello, se echa en falta un mayor protagonismo de personajes como los maridos o amigos de ambas, los cuales apenas cuentan con protagonismo cuando, consideramos, tienen cierto peso específico en diversas partes de la película.

Con todo, consideramos que, sin estar delante de un gran producto cinematográfico, la película está realizada con buen gusto.

Dicho esto, poco más a decir, salvo quizá, nuestra puntuación, que en este caso es: para J, un 5.5, para J un 6, una vez más no vota, ya que, prefirió quedarse acurrucado en el sofá... en fin... que para nosotros, un 5.75




Título original: “Julie and Julia” - USA - 2009
Dirigida por: Nora Ephron
Género: Comedia
Duración: 123 minutos
viernes, 8 de enero de 2010

Avatar

Avatar - Cartel
Teníamos apuntada la fecha de 18 de diciembre como una buena fecha para ir al cine, a ver la última de James Cameron, “Avatar”. Al final, y debido a las fiestas de Navidad, optamos por aplazar algo el día en que los del equipo pasaríamos a engrosar el ya de por si nutrido grupo espectadores que hemos pasado por las salas de cine a disfrutar de esta nueva experiencia en 3D. Porque, no os engañéis, “Avatar” hay que verla en 3D.

Poca gente puede discutir que Cameron es un autor tan poco prolífico, como rentable en tanto a recaudación como en premios. Sin ir más lejos, su última película estrenada había sido la hasta el momento, más taquillera de la historia (con nada menos que 1800 millones de dólares), “Titanic”, y tiene ya 12 años. Pues bien, en poco más de tres semanas en cartelera, su última creación: “Avatar”, lleva ya recaudados más de 1000 millones de dólares.

Bueno, mejor dejamos ya los datos económicos y nos adentramos a lo que realmente nos importa, la película.

Ya os podéis imaginar, después de unos días de aplazamiento y de leer muy buenas críticas, llegamos al cine con ganas de disfrutar de una nueva experiencia, ver cine en 3D. Casi no lo conseguimos, ya que nuestra primera experiencia fue ver el cartelito amarillo de “Primeras filas”... al final fue primera fila... ufff.

La historia trascurre en 2154, en el planeta de Pandora. Allí, un destacamento de humanos (americanos para dejarlo claro), está llevando a cabo un proyecto de investigación militar consistente en entablar relación con una especie aborigen, los Na’vi. Para ello, un equipo de investigadores capitaneados por la doctora Grace (Sigourney Weaver), ha creado réplicas inanimadas de los Na’vi, combinando ADN humano con ADN Na’vi. Estas réplicas son llamadas Avatar, y necesitan de conexión con el humano del que han tomado el ADN para cobrar vida.

El protagonista de la historia llega a Pandora, para sustituir a su hermano meses atrás sin poder guiar a su Avatar. Como se trata de un invento sumamente caro, el ejército llama al ex-marine Jake Sully (Sam Worthington) para que supla a su hermano. Jake, lisiado en acción de guerra, se desplaza con su silla de ruedas a Pandora, sin saber muy bien lo que se encontrará.

Después de unos primeros minutos de presentación de personajes (la doctora Grace y su carácter, el Coronel Miles y su doble cara, y como no, los Avatares y su movimiento), la acción se sitúa ya en los bosques de Pandora, concretamente en una de las varias tribus Na’vi. Allí Jake conocerá a Neytiri (Zoe Saldana), una aborigen que no sin recelos, le irá introduciendo en su mundo, su cultura... su vida.

Poco a poco se van descubriendo los planes de los humanos. Lejos de la saludable necesidad de entablar amistad con los Na’vi y aprender y compartir con ellos, el ejército lo que quiere es explotar el contacto con los Na’vi para apartarles de su lugar sagrado: el gigante árbol donde viven, para conseguir así lo que en su subsuelo se esconde: una cantidad ingente de un raro y carísimo mineral.

A partir de este punto, una vez más, la prepotencia del ejercito americano, genialmente caracterizado por el coronel Miles, el cual usa frases célebres como: “ataque preventivo”, para llevar a cabo lo que en ese momento todos los espectadores nos temíamos una masacre... un genocidio.


Lo más destacable de “Avatar”:

Se nos hace un poco complicado destacar muchas cosas de “Avatar”, pues toda la película en si es destacable. No obstante lo intentaremos:

  • La aplicación de la tecnología Digital 3D. Para los del equipo, es la primera vez que vemos una película 3D real, o sea, sin ser un documental o dibujos animados, y la verdad, una vez superados los primeros minutos de mareo, nos encantó.
  • La interpretación de los 3 personajes principales. Sigourney Weaver (Doctora Grace) está, una vez más, genial, haciéndonos creer su personaje, sus emociones, su dolor. Sam Worthington (Jake Sully), un hasta ahora desconocido para nosotros que, sencillamente nos hizo vibrar, tanto al interpretar al parapléjico Jake, como a su avatar. Zoe Saldana (Neytiri), otra desconocida para nosotros... ains, hasta ahora. Genial para los tres.
  • La impecable combinación de los hilos argumentales. En “Avatar”, Cameron nos ha obsequiado con una bonita historia de amor, una brillante trama bélica y porque no, una historia de defensa de la identidad y el entorno natural. Nos gustó, más que nada porque no dejó ningún hilo sin desarrollo ni final, entrelazándolos magistralmente.
  • El reflejo de nuestra historia como humanos, en la piel de los Na’vi. ¿Cuantas veces dentro de la película hemos visto paralelismos entre los Na’vi y los indios americanos? ¿Cuantas veces la humanidad se ha escudado tras la ciencia para conseguir expoliar un pueblo? ¿Cuantas veces se ha cometido genocidio de forma “preventiva”?


Lo más flojo de “Avatar”:

Os preguntaréis, suponemos... ¿hay algo flojo en “Avatar”? Pues sí, aunque no mucho, por suerte. Para nosotros lo más flojo es:

  • El desarrollo argumental. Sí, os parecerá curioso que alabemos por un lado el argumento y por otro lo machaquemos, pero es que, pese a que nos gustó, no nos sorprendió en ningún momento, pues al poco de ver las intenciones del ejercito, ya sabíamos como acabaría la película...
  • La banda sonora. Pese a que no nos disgustó y está bien adaptada a la acción de cada momento, tampoco nos apasionó, pues ya a fecha de hoy no recordamos ningún tema en concreto.
  • Que se cumplan los rumores que circulan por internet, pues de cumplirse, tendremos “Avatar” para tiempo, ya que como diría el entrañable Hermida: “se dice, se comenta, se rumorea” que Sam Worthington ha firmado por tres películas con Cameron... lo cual nos llevaría una vez más a la moda actual de Hollywood: las trilogías, y para nosotros, la verdad, en esta ocasión no haría mucha falta.


En definitiva, consideramos “Avatar” como una película imprescindible, aunque no la consideremos como una obra maestra. Estamos seguros que pasará a la historia del cine, y lo merece, aunque solo sea por la tecnología utilizada para su realización.

¿Nuestra puntuación? Pues para “J” un 8.6 y para el otro “J” un 9, así que de nota global le ponemos un nada despreciable 8.8

Por cierto, si alguien duda entre verla en versión convencional o en su versión Digital 3D, sin dudas les decimos que pagar la diferencia (de 2 a 3 euros por entrada) para verla en 3D, merece la pena.







Título original: “Avatar” -  USA - 2009
Dirigida por: James Cameron
Género: Fantástica
Duración: 161 minutos