Algunos lo asumirán a
regañadientes, otros se negarán a hacerlo, pero está más claro que el agua que el
mundo del cine, como la vida misma, está en permanente evolución. Y lo está tanto
en los aspectos más técnicos de producción como en la forma en que llegamos a
consumirlo.
Sin ir más lejos, hasta
hace poco, cuando un distribuidor quería llevarnos sí o sí a las salas de cine
compraba espacios publicitarios en televisión, páginas enteras en periódicos,
anuncios en Google y sobretodo, marquesinas y vallas publicitarias. A comienzos
de febrero, el gigante de streaming NetFlix rompió todos los esquemas
anunciando durante la Super Bowl, el lanzamiento inminente en su plataforma de
“Cloverfield: Paradox”, un solo anuncio y dicho lanzamiento llegó a todo el
mundo.
A comienzos de marzo,
Netflix volvió a dar el campanazo publicitario aprovechando que la Paramount se
echó atrás en su intención de estrenar “Aniquilación” a nivel mundial, ya que,
en un abrir y cerrar de ojos se hicieron con los derechos de la cinta de
ficción y la convirtieron en un auténtico fenómeno de masas los días previos a
su estreno en la plataforma.
Hoy, con las aguas del
río que han vuelto ya a su cauce, os queremos explicar nuestras sensaciones
después de haber visto “Aniquilación” (“Annihilation”), la última cinta del
británico Alex Garland.
“Aniquilación” empieza
mostrándonos el impacto de un meteorito en un faro costero. Pasado este primer
flash, la trama se desplaza al tiempo actual presentándonos a Lena (Natalie
Portman), una bióloga exmilitar que se dedica a explicar genética en la
universidad mientras espera el retorno de Kane (Oscar Isaac) su marido, de una
misión militar.
Tras un año de espera,
Kane regresa a casa sin avisar aunque lo hace totalmente aturdido, descolocado
y sin memoria. Lena solo consigue descubrir que ha estado en una zona devastada
que, para más inri, no deja de crecer. Presa por la curiosidad decide unirse a
un grupo de científicas que intentarán llegar al corazón de la misteriosa zona,
algo que no ha conseguido con éxito ninguna de las 11 expediciones militares
anteriores.
Bajo el mando de la
psicóloga Ventress (Jennifer Jason Leigh), el grupo formado por, además de la
doctora, Lena, Jossie (Tessa Thompson), Cass (Tuna Novotny) y Anya (Gina Rodriguez) intentará adentrarse
en el espacio restringido denominado “Zona X” para llegar al corazón del área
para investigarla.
Los primeros pasos en
la zona resultan desconcertantes para el grupo ya que en su interior, las leyes
de la naturaleza tal y como las conocen las científicas se ven constantemente
alteradas.
Con el paso del tiempo,
el grupo de científicas va descubriendo alguno de los pormenores del “Zona X”, la
devastación, las mutaciones genéticas que sufren tanto los animales como el
resto de especies que aún viven en la zona, los extraños paisajes, violentas
irrupciones, ataques al grupo y como no podría ser de otra manera, el deterioro
físico y psicológico del mismo. ¿Conseguirá alguien de la expedición llegar al
núcleo del “Zona X”? Nosotros lo sabemos, pero como ya os podéis imaginar, nos
lo guardaremos para no alterar nuestro funcionamiento habitual.
Campaña publicitaria
aparte y sin ningún género de dudas, “Aniquilación” tiene dos puntos claramente
destacables frente al resto, las interpretaciones y la ambientación
acústico-visual. Sin lugar a dudas, la fotografía de “Aniquilación” es
sorprendente y cautivadora, capaz de envolvernos en un espectáculo de cambios
genéticos y de edificios abandonados, mientras nos vemos engullidos en un
submundo tan desconocido como atrayente.
Interpretativamente,
nuestro más sincero aplauso a Natalie Portman y a Jennifer Jason Leigh por sus
grandes trabajos aportando unos personajes complicados, marcados por sus dramas
personales y haciendo que nos impliquemos con ellos y suframos sus vivencias y
descubrimientos en la “Zona X”.
También nos gustaría
destacar el montaje de la cinta, ya que, aunque la primera de las tres partes
en que se descompone la trama argumental de “Aniquilación” es lenta y
ciertamente aburrida, las dos siguientes mantienen un ritmo creciente y
adictivo. Al final, vale la pena el esfuerzo de aguantar la primera parte de la
historia.
No os vamos a engañar,
“Aniquilación” (“Annihilation”) tiene fallos, y no pocos, el principal de ellos
es, sin lugar a dudas la ambigüedad que se respira durante todo el metraje,
final incluido, preguntándonos: ”¿es una historia de extraterrestres?” o “¿es
otra forma de interpretar esa lacra que azota nuestra sociedad llamada cáncer?”.
La verdad es que, quizá son demasiadas las interpretaciones y decisiones que
Alex Garland (el guionista y director de la misma) deja totalmente a elección
del espectador.
Por nuestra parte, y por
todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “Aniquilación” es de un 7
sobre 10.
Título original: “Annihilation” – USA – 2018
Dirigida por: Alex
Garland
Duración: 115 minutos
Género: Ficción,
Thriller