martes, 22 de junio de 2021

Seven

Seven - Poster
Cinematográficamente hablando, la última década nuestras salas de cine han tenido unos protagonistas más que claros, los superhéroes, han proliferado como setas en el bosque un otoño lluvioso, y ojo, no es malo, y menos para las arcas de Disney (a través de su entramado de empresas entre las que podemos encontrar a Marvel).

Si nos vamos unos años atrás, nos encontramos con otra prolífica década para la industria del cine, aunque esta ocasión, con la proliferación de otro tipo de personajes que, quizá, han marcado a muchos más que los superhéroes, los asesinos en serie ¿Os acordáis de Hannibal Lecter? ¿Y de Ghostface?  O incluso de Patrick Bateman, grandes asesinos de los 90’s, aunque, ¿os acordáis de John Doe?

Seguramente pocos habréis contestado que sí a las cuatro preguntas, y quizá muchos no sepáis ni quien es John Doe, aunque si os decimos que es un asesino que llevó de cabeza a unos pletóricos Morgan Freeman y Brad Pitt por allá 1995 quizá os vendrá a la memoria. Sí, hoy en este rincón os hablaremos de un clásico del thriller, la cinta de David Fincher: “Seven”.

La historia de “Seven” empieza presentándonos a Somerset (a quien da vida Morgan Freeman), un detective de homicidios de Nueva York que está en su última de semana de trabajo antes de su jubilación cuando recibe el aviso de que ha aparecido un cadáver en extrañas circunstancias. Dada la situación de Somerset, se le junta en la investigación el detective David Mills (interpretado por Brad Pitt), un joven e impulsivo recién llegado a la gran manzana.

Cuando llegan a la escena del asesinato, se encuentran con algo totalmente impensable, un hombre obeso atado ante una mesa al cual parece que obligaron a comer hasta, literalmente, reventar. Ya de vuelta a la comisaría y vista la actitud de Mills, Somerset intenta pasarle el caso, pero muy pronto, un nuevo asesinato le hace replantear su decisión.

El segundo asesinato es el de un abogado al que parece, le obligaron a cortarse parte de su cuerpo y morir desangrado. Investigando el escenario del crimen encuentran, escritas en sangre, la palabra ‘avaricia’. Somerset al verlo vuelve donde el obeso y encuentra, escondida, la palabra ‘gula’, confirmando su suspecha de que están ante un asesino en serie que representará con sus asesinatos, los siete pecados capitales.

Gracias a las pruebas encontradas en el despacho del abogado, unas huellas escondidas tras un cuadro, Mills y Somerset se dirigen hacia un apartamento donde se encuentran maniatado en la cama a un hombre moribundo, lleva atado un año, y representa la ‘pereza’.

Tres días, tres asesinatos y en todos, la confirmación de que el asesino es una persona metódica que se toma mucho tiempo para llevar a cabo cada acto. Después de un estudio de los libros que hablan sobre los siete pecados capitales y se han prestado en la red de bibliotecas, llegan hasta un hombre que se hace llamar John Doe (interpretado por Kevin Spacey), aunque este logra huir disparándoles.


Escena de uno de los crímenes de "Seven"
Escena de uno de los crímenes de "Seven"


Poco después de este encontronazo, una prostituta es brutalmente asesinada por su cliente quien confiesa que Doe le ha obligado, representando la ‘lujuria’ y, casi sin tiempo de reacción, una llamada les alerta de que una joven está muriendo en su casa, Mills y Somerset se la encuentran desfigurada con una nota, es la quinta víctima y representa la ‘soberbia’.

¿Encontrarán a tiempo a John Doe? Es más, ¿conseguirán Mills y Somerset evitar que se consuman los asesinatos de los siete pecados capitales? Como ya os podéis imaginar, nosotros no os lo contaremos y menos, en este caso, en el que el final de “Seven” es realmente espectacular y memorable.

Técnicamente “Seven” representó en su momento, y continúa, aún a día de hoy  representando a uno de los máximos exponentes del género del thriller, consiguiendo mezclar con maestría todos los ingredientes que definen dicho género: la tensión, un argumento lleno de giros, una ambientación cuidada, tenebrosa y bien acompañada por la banda sonora que envuelven a un asesino frio y despiadado, capaz de lo más atroz y espeluznante.

En el apartado interpretativo, nos quitamos el sombrero ante el dúo protagonista de “Seven”, dos cracks de la interpretación para los que “Seven” representó un punto y aparte en su carrera, por un lado, nos encontramos con un Brad Pitt haciendo suyo un David Mills que, como él, crece dejando atrás su pasado (Pitt el de guapo de Hollywood, y Mills el de detective pueblo), y por el otro, tenemos a Morgan Freeman dando vida brillantemente a un Somerset, metódico y experimentado, dos caras de la misma moneda que no solo se complementan si no que se compensan. Y todo sin olvidar el buen trabajo de Kevin Spacey dando vida al inteligente y atroz John Doe.

Somos conscientes que, para mucha gente, “Seven” es demasiado fuerte, aunque para nosotros, es todo un clásico del cine, un imperdible. Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “Seven” es de un 8.5 sobre 10.
 



Título original: “Seven” – USA – 1995
Dirigida por: David Fincher
Duración: 127 minutos
Género: drama, Thriller, policiaca
miércoles, 16 de junio de 2021

Lupin - Temporada 1

Lupin - Poster - Temporada 1
Dentro de la política, obviamente impuesta por las autoridades, de tener un porcentaje de producción de cada país donde da servicio a sus socios, la plataforma de streaming Netflix, parece que va manteniéndolo, consiguiendo además grandísimos datos de audiencia a nivel mundial.

Uno de estos últimos grandes éxitos a nivel mundial vino de Francia, y lo hizo con una miniserie que, literalmente, arrasó en 2021. Os estamos hablando “Lupin”, la serie inspirada en el mítico personaje Arsène Lupin, aunque como intuimos que muchos no sabréis quien es, empezaremos contándooslo.

“¿Quién es Arsène Lupin?” Arsène Lupin es un personaje literario creado por Maurice Leblanc y que estuvo activo la primera mitad del pasado S. XX.  Lupin era un ladrón de guante blanco que actúa, pese a hacerlo al margen de la ley, contra ricos y auténticos villanos.

Pues bien, la serie “Lupin” recupera las aventuras de este mítico personaje para llevarlo a las calles de la actual Paris.

“Lupin” empieza presentándonos al auténtico protagonista de la miniserie, Assane Diop (a quien da vida un acertado Omar Sy). Le conocemos en las instalaciones del museo del Louvre, trabajando como portero/conserje, aunque muy pronto vemos que tiene otro objetivo, hacerse con un valioso collar de Maria Antonieta, la familia propietaria del cual, los Pellegrini, quieren subastarlo. Pese a la buena organización y planificación, el robo no sale exactamente como Diop espera.

Esta sorpresa en la resolución del robo conlleva una sorprendente revelación, la relación entre la familia Pellegrini en el encarcelamiento y posterior muerte en la cárcel de Babakar Diop, el padre de Assane, 25 años atrás.

A partir de este momento, Assane empezará una carrera contra reloj para desenmascarar al magnate Hubert Pellegrini, y lo hará sirviéndose de las acciones del mítico personaje de Lupin (ídolo tanto suyo como de su fallecido padre).

La investigación sobre la muerte de su padre llevará a Assane desde hablar con presos a enfrentarse y casi secuestrar al comisario Dumont quien le llega a confesar su implicación en los actos acontecidos en el pasado y, como no podía ser de otra forma, la vinculación de Pellegrini.

Con todo, acercarse al magnate Hubert Pellegrini y su enfrentamiento con el comisario Dupont lleva a Diop a una difícil situación, ya que deberá mantener esta investigación mientras sortea el trabajo de la policía francesa, que continúa investigando el robo en el museo del Louvre, y, sobre todo, intenta proteger a su ex mujer, Claire y su hijo adolescente, Raoul Diop (Etan Simon), otro gran fan de Arsène Lupin.

Por suerte para Diop, Youssef Guedira, un avispado policía acaba descubriendo lo que realmente pasó en museo del Louvre con el fallido robo del collar de Maria Antonieta, aunque vista la implicación del comisario en el caso y el poder de Pellegrini en la vida social francesa, ¿será suficiente para liberar a la familia Diop de los peligros? Evidentemente, nosotros lo sabemos, aunque nos lo guardaremos bien.


Assane Diop (Omar Sy), protagonista de "Lupin"
Assane Diop (Omar Sy), protagonista de "Lupin"


Técnicamente, os vamos a ser muy sinceros, no entendemos muy bien a que es debido el tremendo éxito de esta primera temporada de “Lupin” pues, aunque podríamos considerar que, aunque estamos ante una serie con mucho potencial, sus más que evidentes problemas de montaje y su quizá, extremadamente corta duración (son sólo 5 capítulos de unos 40 minutos) para la historia que se quiere contar, convierten a “Lupin” en un amasijo de situaciones difíciles de digerir y de disfrutar completamente.

Dentro de los principales problemas que, bajo nuestro punto de vista, tiene esta primera temporada de “Lupin” encontramos: un enrevesado uso de los flash-backs con los que intentan contarnos lo que realmente pasó 25 años atrás (mezclando las aventuras de un adolescente Assane y los hechos que llevaron a la cárcel a Babakar) y a la vez, nos cuentan los trucos que usa Diop en el presente pocos minutos después de los lleve cabo, y todo, mezclado con otro gran problema, la falta de un malo claro y real a la altura de Assane Diop.

Interpretativamente, en la primera temporada de “Lupin” nos entramos con un inmenso trabajo de Omar Sy, su protagonista, un hombre que, con su trabajo consigue sustentar completamente la serie eclipsando totalmente al resto de personajes, los cuales y para descargar de culpa al casting, tienen poquísima definición y fuerza.

Sinceramente, nos ha parecido la primera temporada de una serie bastante tramposa (por su montaje), que intenta ser ligera y que acaba siendo un poco mareante, con todo, no la suspenderemos, pero nuestra nota final para la primera temporada de “Lupin” es de un 5 sobre 10.
 



Título original: “Arsène Lupin” - 2021 – Francia
Año de creación: 2021
Año de finalización: 2021 (primera temporada)
Duración: 5 capítulos (de unos 40 minutos cada uno)
Género: Thriller, Policiaco

 

viernes, 11 de junio de 2021

Tiempos modernos

Tiempos Modernos - Cartel
Cuando uno piensa en poner una película para disfrutar de un buen rato de desconexión, raras veces piensa en escoger un clásico, y ni mucho menos un clásico con casi 85 años a sus espaldas, a no ser claro, que uno sea un gran cinéfilo.

No es nuestro caso, aunque, si nos seguís, sabréis que nos encanta cambiar de género cinematográfico y que, de vez en cuando, sí que nos gusta ver películas de otros tiempos. Si hace unos meses le dimos la oportunidad a “La quimera del oro” del maestro Charles Chaplin, días atrás pensamos que sería un buen momento recuperar otra de sus películas, la última en la que apareció él como protagonista: “Tiempos modernos”.

“Tiempos modernos” se estrenó en 1936 y arrasó en su época, tanto que aún 8 décadas después continúa siendo admirada por la mayoría. En las próximas líneas os contamos el porqué.

“Tiempos modernos” empieza situándonos en una época convulsa, poco después del estallido de la crisis de finales de los años 20. En las primeras secuencias, vemos que nos encontramos en una empresa metalúrgica donde el conjunto de sus trabajadores trabaja, uno al lado de otro, durante interminables jornadas laborales haciendo siempre el mismo gesto, mientras en una zona apartada y con mucha tecnología, nos encontramos al patrón, dando órdenes y marcando el ritmo de la cadena de producción.

Uno de los obreros de la línea es Charlot (a quien da vida, obviamente, el propio Charles Chaplin). Si bien Charlot al comienzo lleva bien su tarea de atornillar dos tornillos por pieza, poco a poco adquiriendo más y más tics nerviosos mientras el gran jefe ordena, más y más velocidad de la línea.

Poco antes de finalizar su jornada, Charlot pierde totalmente la razón y es despedido por jefe y enviado al hospital para recuperarse de su crisis nerviosa. Al salir del hospital, y con la orden estricta de no someterse a ningún estrés, por un malentendido, es tomado por el líder sindical de la revolución, siendo apresado por comunista y revolucionario.

Ya en la cárcel, nuestro protagonista después de tomar accidentalmente cocaína que otro preso había introducido, desbarata un motín y salva al alcaide a los guardias.

Fuera de la cárcel, la revolución continúa su camino y se cobra algunas vidas, como la de un parado, padre de familia que deja viuda (una mujer dura y espabilada que sabe cómo encontrar comida y moverse en tiempos tan difíciles) y dos hijos.

Poco después, y al poco de salir de la cárcel, el Charlot fracasa en su intento de volver al mundo laboral por lo que, hace lo posible por volver al sitio donde tenía comida y cama, la cárcel. Cuando está a punto de conseguirlo, la vida le cruza con la viuda del obrero muerto y casi inmediatamente surge la magia entre ellos, tanto que, cuando ambos son enviados de nuevo a la cárcel deciden fugarse juntos del furgón.

No nos extenderemos más en el lado argumental de “Tiempos Modernos” y nos centraremos en su análisis técnico.


Charlot en la cadena de producción
Charlot en la cadena de producción


Para muchos especialistas, “Tiempos Modernos” es una de las obras puntales de la historia del séptimo arte, una historia que refleja como ninguna hasta el momento, el retrato de una sociedad oprimida por una gran crisis económica y social. La pobreza y el hambre se relacionan con una modernización de los procesos productivos de las empresas, obligadas a producir más y más por encima de las personas. Vaya que, toda una crítica contra el sistema capitalista enfocado eso sí, como un canto a la esperanza a través del humor y del amor.

En este punto también es de remarcar que, aunque “Tiempos Modernos” es una película muda, los efectos sonoros, tanto de la propia música compuesta por Chaplin, como la sonoridad de la fábrica son realmente especiales.

Desde el punto de vista interpretativo, indicar que Charles Chaplin vuelve, en “Tiempos modernos” a interpretar su personaje más célebre, Charlot (es la última película en la que lo hizo), el entrañable vagabundo torpón que se esfuerza constantemente para hacer lo correcto, a pesar que a veces parece lo contario. Está realmente genial, consiguiendo transmitirnos lo que Chaplin quería.

Con todo, y por todo lo que os hemos contado hasta ahora, nuestra nota final para “Tiempos modernos” es de un 9 sobre 10. Una película absolutamente imprescindible para cualquier persona que ame el cine.
 



Título original: “Modern times” – 1936 – USA
Dirigida por: Charles Chaplin
Duración: 89 minutos
Género: Comedia, Drama
lunes, 7 de junio de 2021

Con amor, Víctor - Temporada 1

Con amor, Víctor - Temporada 1
Desde hace años, cuando hay un éxito inesperado, la industria de Hollywood lo tiene claro, hay que buscar la forma de continuar estirando el chicle, ya sea con secuelas o precuelas, ya sea inventándose un spin-off con alguno de los personajes principales o de sus historias. Con la popularización de las plataformas de streaming esto no solo no ha cambiado, sino que, además, ha abierto la puerta a continuar historias que empezaron en la gran pantalla, en la pequeña y en forma de serie.

Uno de los últimos casos ha sido el aprovechamiento del éxito de crítica y comercial de la primera película que daba todo el protagonismo a un adolescente que tenía que afrontar sus miedos en su salida del armario. Corría el año 2018, y os hablamos de “Con amor, Simon”.

Dos años más tarde, en 2020, se estrenó en Estados Unidos (a través de la plataforma Hulu) una serie basada en dicha cinta, titulada: “Con amor, Víctor”. Unos meses más tarde y coincidiendo con el lanzamiento mundial de Star dentro de Disney+, esta serie ha llegado a nuestras pantallas y hoy, os contamos nuestra opinión.

“Con amor, Víctor” empieza presentándonos a la familia Salazar llegando a Atlanta desde Texas, son Armando e Isabel, los padres, y Víctor (Michael Cimino) Pilar y Adrián, los hijos. Muy pronto, Víctor entabla amistad con Félix, su vecino y unos de los alumnos más poco populares del instituto Creekwood.

En sus primeros días en Creekwood, Víctor conoce a Mía (una apasionada del arte) y a su amiga Lake (una forofa de las redes sociales) con quien forma grupito, aunque por quien siente una potente atracción es con Benji Campbell, su compañero de clase.

A partir de este momento se iniciarán un conjunto de tramas en las que Víctor deberá ir deshojando la margarita de su sexualidad, apuntando en muchas ocasiones hacia la bisexualidad, ya que, aunque se enamora profundamente de Mia y empieza a salir con ella, nunca puede quitarse de la cabeza a Benji.

Paralelo a todo esto, Víctor de entera de la historia de un célebre exalumno de Creekwood, Simon, un chico que años antes se hizo popular por mostrar y aceptar su sexualidad ante todos. Como vive en un mar de dudas, Víctor se pone en contacto con Simon a través de una red social y este le irá dando consejos en base a sus propias experiencias.

Incapaz por decidirse, Víctor inicia un noviazgo con Mia, a la vez que sus dos amigos, Félix y Lake inician también una tóxica relación que poco a poco les va abriendo los ojos. Con todo, Víctor no se siente preparado para tener relaciones sexuales con Mia, sembrando con eso la duda entre las chicas, duda que a su vez mantiene también el propio Víctor con sus deseos hacia Benji aunque este tenga novio.


Víctor mirando con deseo a Benji
La tensión entre Víctor y Benji es palpable en cada escena


Poco más os vamos a contar del argumento de la primera temporada de “Con amor, Víctor”, salvo que, para descubrirse, o intentarlo, Víctor viajará hasta Nueva York, donde se reunirá con Simon (a quien da vida el mismo Nick Robinson que le interpretó en “Con amor, Simon”) y sus amigos, aunque, ¿este viaje tendrá el resultado esperado?

Técnicamente “Con amor, Víctor” es un spin-off con poquísimo riesgo y con, además, poquísima originalidad. La historia parte de los mismos patrones que ya usó “Con amor, Simon” añadiéndole dos nuevos ingredientes; la racialización de Víctor y su familia (las referencias a sus raíces portorriqueñas son constantes los primeros capítulos) y la apuesta por la bisexualidad como medio de indefinición del protagonista. Con todo, ambas historias pierden fuelle con el paso de los capítulos siguiendo la estela de lo que pasó en la película original, aunque sin llegar nunca a su nivel.

En cuanto a las interpretaciones, y bajo nuestro punto de vista, “Con amor, Víctor” peca en exceso de una falta de definición de sus personajes, haciendo que los trabajos de sus intérpretes queden encorsetados en una indefinición demasiado marcada, todo esto a excepción, obviamente, de Víctor Salazar donde ahí sí, Michael Cimino se hace amo y señor de cada escena en la que es protagonista.

No os vamos a engañar, “Con amor, Víctor” no es una mala serie, aunque quizá, se le nota demasiado el puritanismo americano, dejando esta primera temporada como una serie bonita de ver, pero sin profundidad en las tramas ni en los personajes, cosa que sí tenía su predecesora.

Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota para esta primera temporada de “Con amor, Víctor” es de un 6.5 sobre 10.
 



Título original: “Love, Victor ” - 2020 – USA
Año de creación: 2020
Año de finalización: 2020 (primera temporada)
Duración: 10 capítulos (de unos 30 minutos cada uno)
Género: Drama, Comedia