Los que nos seguís, ya
sabéis que los del equipo no somos mucho de películas de acción, pero cuando
estuvimos viendo “Shame”, el trailer de “Indomable” nos gustó. Tenía acción, un
personaje principal duro y parecía que también contaba con un argumento con
pies y cabeza, así que, buscamos una coincidencia entre un hueco en nuestra
agenda y un pase en la cartelera de “Indomable”.
La historia empieza con
nuestra protagonista, Mallory Kane (Gina Carano), llegando a uno de los típicos
restaurantes de carretera perdido entre las colinas de Estados Unidos. La chica
está en tensión, parece preocupada, y no tardaremos en saber porqué. La
persiguen, y quieren matarla.
Mallory es una agente
secreta que es contratada como Freelance por varios gobiernos cuando estos no
pueden, o no quieren, llevar a cabo determinadas operaciones especiales. A
nuestra protagonista, todos los problemas le vienen precisamente de una de sus
últimas misiones, y esto será lo que a modo de flashback nos contará
“Indomable”.
Todo parece empezar con
una acción en Barcelona, donde ella y un grupo de mercenarios debe rescatar a
un secuestrado. Cuatro puñetazos, dos patadas y tres secuencias por las calles
de la ciudad condal dan por finiquitada la misión. Poco después, recibe un
nuevo encargo de Coblenz (Michael Douglas) por el cual debe desplazarse a
Dublin.
Allí deberá desenvolver
su misión con Paul (Michael Fassbender), pero nuestra protagonista es
traicionada por su propia gente y tiene que iniciar su particular huida hacia los
Estados Unidos.
Una vez allí, Mallory continúa
su huida, la cual se sitúa a medio camino entre la venganza y la necesidad de
llegar a casa de su padre John Kane (Billy Paxton).
Ya veis, un argumento de
lo más trillado en el cine, salvable únicamente si “Indomable” hubiese sido una
película con muchísima acción, con una fotografía genial, o incluso por grandes
interpretaciones de sus protagonistas, pero desgraciadamente para nosotros, los
espectadores, nada de esto sucede en los 93 minutos de metraje.
La verdad es que nos
sentimos defraudados. Fuimos al cine esperando encontrar un rato de diversión
sin demasiadas pretensiones, una película de acción con buenas coreografías de
lucha y nos encontramos con un envejecido y frío Michael Douglas, un
descolocado Antonio Banderas haciendo, como no, un papel de hispano, un Michael
Fassbender que, pese a cumplir, está a años luz de los papeles que nos tiene
acostumbrados últimamente, y una actriz protagonista que, si pretendía ser la
versión femenina de Jason Bourne, se quedó en eso, en la pretensión.
Tampoco el ritmo que le
imprime Soderbergh (el director de “Indomable”) merece una mención positiva,
pues ya desde los primeros minutos andábamos más pendientes del reloj que de la
acción inconexa de la película. Por todo esto, le ponemos un frío 3,5 sobre 10.
Título original:
“Haywire” – 2011 – USA
Duración: 93 minutos
Dirigida por: Steven
Soderbergh
Género: Acción, Thriller