miércoles, 26 de octubre de 2022

Way down

Way Down poster
No lo vamos a negar, reflejar un complejo robo en el cine ha sido siempre una fuente de inspiración para llenar las salas de cine. Lo hemos visto en “Atraco perfecto” (la opera prima de Kubrick), “The Italian Job”, “El caballero oscuro” (de Nolan) o porque no decirlo, en la saga “Ocean’s …”, y más recientemente en la exitosa serie “La casa de papel”.

Siguiendo la estela de esta última y aprovechando su tirón, en noviembre de 2021 llegó a nuestras carteleras una película con tantas pretensiones como variopinto e internacional su casting. Os hablamos la, de por el momento, última película del español Jaume Balagueró: “Way down”.

“Way down” empieza presentándonos a un equipo de piratas o rescatadores de tesoros capitaneados por Walter (Liam Cunningham) quienes después de bastantes esfuerzos se hacen con el tesoro del buque “La Fortuna”. Con todo, la alegría les dura poco, ya que son interceptados por la policía de aduanas quienes sin miramientos les requisan el botín.

Años más tarde, en la universidad de Cambridge nos encontramos con un joven prodigio, Thom (a quien da vida Freddie Highmore), un chico perseguido por las empresas más importantes del mundo que intentan hacerse con sus servicios, aunque él prefiere algo que le motive más. Por eso, cuando recibe una extraña oferta de Walter, no duda en aceptarla.

La oferta es clara, quiere realizar una “acción”, o como le llama él, un “rescate”. Dicho rescate no es otro que recuperar una parte del tesoro recuperado del buque “La Fortuna” y que actualmente se encuentra en uno los lugares más seguros del mundo, el Banco de España, en Madrid.

El equipo lo formarán, además del propio Thom, los expertos en rescates de ese tipo: James (Sam Riley), Lorraine (Astrig Bergès-Frisbey) y Simón (Luis Tosar). Y os preguntaréis, ¿qué pinta un joven como Thom en un equipo de profesionales del robo? Pues como ya os podéis imaginar, sobre él y su inteligencia recaerá la responsabilidad de diseñar una maniobra de ingeniería inimaginable para desvalijar la inexpugnable caja fuerte del banco antes de que el jefe de seguridad, Gustavo (José Coronado) logre impedirlo.

Podríamos decir que, con todos estos ingredientes ya tenemos totalmente preparado el menú de “Way down” pero no, falta uno, y muy patrio, el futbol y más concretamente la celebración del Mundial de 2010 de Suráfrica que, como bien sabréis ganó España. Pues sí, el atraco se deberá celebrar durante la final de dicho Mundial, momento en el que, por suerte del equipo de ladrones, miles de personas abarrotarán las puertas del propio banco.

¿Qué más os podemos contar del argumento de “Way down”? pues la verdad, poco más, pues cualquier cosa que os contemos podría ser un spoiler, por tanto, nos pasaremos a nuestro análisis más técnico.


Freddie Highmore buscando el mejor plan
Freddie Highmore buscando el mejor plan


Empezaremos por lo que nos ha parecido mejor, la fotografía de “Way down”, no os vamos a negar que el despliegue visual es, ciertamente bueno, tanto los exteriores, como la representación de la propia cámara y sus mecanismos o incluso la propia acción.

En el otro lado de la balanza, el negativo, nos encontramos con un guion realmente flojo que nos deja, en cada secuencia una extraña sensación de “esto ya lo he visto” (y tened en cuenta que nosotros no hemos visto “La casa de papel”), y es que, sobre el mundo de los atracos en el cine, ya hay mucha filmografía, muchos equipos de ladrones con miembros expertos en una cosa, con un cerebrito que siempre salva los papeles y los planes ante un jefe de seguridad duro, chapado a la antigua, y perdedor.

No os vamos a engañar, la publicidad y la línea argumental apuntaba maneras, pero realmente “Way down” se queda muy coja, se centra en un conjunto de clichés sobre atracos y con unos intentos de giro argumental que, a la mayoría ni sorprenderán, en definitiva, “Way down” no aporta nada en este sentido, ni tan siquiera sorpresa o capacidad de enganche.

Argumentalmente también podríamos decir que “Way down” tiene una de cal y otra de arena. En el lado positivo nos encontramos con dos grandes secundarios, Emilio Gutiérrez Caba (como gobernador del Banco de España) y José Coronado (jefe de seguridad del banco), y un gran trabajo de equipo en el que todos, funcionan a la perfección. En el lado negativo, y no porque haga un mal trabajo, colocaremos al bueno de Freddie Highmore como Thom, el ladrón más inteligente y más resolutivo, pero que, a la vez, centra toda su actuación y su papel en la capacidad de su cerebro (hacer que piensa) lo cual, acaba provocando que uno sepa si ve a un ladrón o ve a Shaun Murphy (el protagonista de “The good doctor”) sin bata.

Si nos habéis leído hasta aquí pensaréis, vaya, no les ha gustado “Way Down”, y acertaréis. Con todo, no os diremos que sea una mala película, aunque sí que os diremos que, desgraciadamente, creemos que no merece la pena gastar los casi 9 € (depende del cine que vayáis, claro) para verla en pantalla grande.

Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “Way Down” es de un 4.5 sobre 10.



Título original: “Way down” – 2021 – España
Dirigida por: Jaume Balagueró
Duración: 118 minutos
Género: Thriller, acción

 

 

 

lunes, 17 de octubre de 2022

The kings of summer

Los Reyes del Verano - Poster
Crecer, un acto que, por el mero hecho de que todos lo hacemos, habitualmente lo infravaloramos totalmente ya que, involuntariamente lo reducimos al mero hecho de incrementar el tamaño, de pasar días, o más vulgarmente acumular arrugas. Lejos de esta superficialidad, crecer es sumar y restar vivencias (y personas a nuestras vidas), aprender a equivocarse, a caer y a levantarse, a vivir el presente con un recuerdo del pasado y una ilusión para el futuro.

Plasmar este juego de cartas en una película de cine es algo realmente complicado, y aunque se ha intentado en varias ocasiones (“Boyhood”, “El señor de las moscas”, etc.), no es un camino muy explotado, y la verdad, no nos extraña.

Cuando escogimos “Los reyes del verano” / “The kings of summer”, lo hicimos sin demasiado convencimiento, pero, pese a todo, tomamos posesión de nuestro sofá y le dimos al play, y hoy, os lo contamos aquí.

“Los reyes del verano” empieza presentándonos a Joe Toy (a quien da vida Nick Robinson), un chico adolescente que vive bajo la presión de su padre, un hombre viudo que apenas le deja respirar sin corregirle, una situación totalmente insoportable para Joe, de la que únicamente escapa en la escuela donde nota una conexión con alguno de sus compañeros.

Uno de estos compañeros es Patrick (Gabriel Basso), un chico deportista de su misma edad, quien, aunque sin llegar a extremo de Joe, también se siente totalmente anulado por unos padres que intentan ser ‘enrollados’ pero no le dejan ser él, y que de tan sobreprotectores y cariñosos que, literalmente, le producen alergia al chico.

Después de un par de situaciones de lo más desastrosas, Joe convence a Patrick de iniciar una aventura lejos de sus respectivos padres, construyendo una cabaña en medio del bosque y viviendo allí según sus normas y según lo que puedan conseguir de la naturaleza.

Sin saber muy bien porque ni como, a la pareja se les junta un tercer adolescente, el excéntrico Biaggio (Moises Arias) quien les ayudará a construir su casa, aportará su grado de locura al grupo y se integrará con ellos cuando, entre todos, deciden que la casa ya cumple con unos mínimos. Ese día, los chicos se llevan algunas de sus pertenencias, algo de dinero y algo de comida para empezar su nueva vida.

En el bosque, los tres jóvenes se sienten libres, se reparten las tareas (recolección de frutas y bayas, caza, etc.), comparten juegos, se enfrentan a peligros y, en definitiva, viven y crecen. Crecen tanto que, a las pocas semanas de su aventura, y con sus padres buscándolos con la policía, Patrick y Joe ponen en común lo único que les falta para la plena felicidad, la presencia de una chica.


Joe, Patrick y Biaggio construyendo su cabaña
Joe, Patrick y Biaggio construyendo su cabaña


Sí, llegó el amor al grupo, y con ello, la escogida, Kelly, una chica con la que Joe tiene buena relación. Sin pensarlo mucho, y bajo la absoluta promesa de secreto, la llevan a la casa del bosque donde por unos días se integrará en el grupo, aunque no como espera Joe ya que Kelly, se siente atraída por Patrick y esté le corresponde.

Como ya os podéis imaginar, el drama se masca y finalmente se produce ya que, en un ataque de rabia Joe echa a Patrick sin miramientos y de rebote a Biaggio iniciando así, su vida en solitario. Una vida mucho más complicada que, nos permitiréis, nos guardaremos en el tintero igual como nos guardamos el desenlace de “Los reyes del verano”.

“Los reyes del verano” / “The kings of summer” es una película insospechadamente bien hecha la cual, consigue retratar más que correctamente ese momento vital que todos hemos tenido o tendremos en algún momento, el cual no es otro que, vivir nuestra propia vida. En este sentido, nuestra enhorabuena al equipo de guion ya que, consiguen reflejar a la perfección la compleja vida de los jóvenes adolescentes con sus contradicciones.

En el lado negativo de la balanza, nos encontramos en que en “Los reyes del verano” tenemos dos partes claramente diferenciadas, la primera va desde cuando los chicos deciden irse de casa hasta la llegada de Kelly al grupo, y la segunda, desde la disolución del mismo hasta el final de la cinta, y estas dos partes son diametralmente dispares ya que, mientras en la primera, la ilusión y la fuerza marcan el ritmo, en la segunda todo se viene abajo en una resolución rápida, previsible y plana. Tampoco nos ha gustado que todas las bromas recayeran sobre Biaggio, haciéndonos sentir que se le estereotipaba al diferente.

Interpretativamente, “The kings of summer” es una película con un gran acierto en el casting, donde brillan a partes iguales los tres protagonistas, tres adolescentes dando vida a adolescentes (algo complicado de ver en el mundo del cine) con unos trabajos soberbios, transmitiéndonos naturalidad, fuerza, y todo el abanico de emociones que acarrea la adolescencia. Simplemente genial.

Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “The kings of summer” es de un 6 sobre 10.



Título original: “The kings of summer” – USA – 2013
Dirigida por: Jordan Vogt-Roberts
Duración: 93 minutos
Género: drama, adolescencia

 

sábado, 8 de octubre de 2022

Woo, una abogada extraordinaria - Temporada 1

Woo - Una abogada extraordinaria - Poster
Cuando uno piensa en una persona autista, sobre todo para aquellos que no tenemos ninguna en nuestro círculo personal más o menos cercano, piensa en una persona encerrada en si misma (con un contacto casi inexistente con su entorno), con movimientos corporales repetitivos, dificultades para la comunicación oral e incluso no oral, y por qué no decirlo, con ciertas limitaciones intelectuales.

Con todo, las personas con TEA o Trastorno del espectro autista, no siempre cumplen con todos estos prototipos o etiquetas que la mayoría tenemos muy conocidas, en ocasiones, las personas con TEA tienen una inteligencia superior al resto, aunque, en cualquier caso, estas personas tienen que enfrentarse a una lucha constante, tanto contra su propia enfermedad como contra la sociedad ya que, habitualmente, no les acepta.

Reflejar todo esto en el mundo de la televisión y/o cine es algo realmente complicado ya que, habitualmente no es lo que el gran público quiere ver, con todo, los últimos años tenemos ejemplos de, buenas producciones como “Especiales” o la televisiva “The Good Doctor”.

Este 2022 y desde Corea del Sur, los últimos años convertida en una de las grandes potencias del mundo de la producción cultural, nos ha llegado una serie de 16 capítulos que, protagonizada por una persona con trastorno del espectro autista, nos ha hecho pensar, nos ha emocionado e incluso nos ha hecho reír, os hablamos “Woo, una abogada extraordinaria”.

“Woo, una abogada extraordinaria” nos narra el día a día de Woo Young-woo (interpretada por Park Eun-bin) una joven abogada licenciada cum-laude en la Universidad de Seúl quien después de no pasar el corte del proceso de selección, es contratada por el prestigioso gabinete de abogados Hambada.

De las primeras cosas que nos cuenta “Woo, una abogada extraordinaria” es la historia de Woo Young-woo, una chica que, abandonada por su madre y al cuidado de su afable y cariñoso padre, no habla hasta los 9 años, cuando es diagnosticada de TEA y tiene que ver como el casero donde viven agrede a su padre por no pagar el alquiler. Allí en ese punto, se pone a recitar la ley que podría condenar al casero por violencia contra su padre.

En la actualidad, la abogada Woo Young-woo, en su primer día en el bufete Hambada, además de tener que enfrentarse a muchas cosas que no conoce o que le aterran (cruzar puertas giratorias, acceder a despachos, relacionarse con otras personas, etc.), debe integrarse en un nuevo equipo de abogados.

Aunque el primer día en el bufete resulta ciertamente complicado, su dedicación, el conocimiento de las leyes y capacidad de resolución, hace que, muy pronto sus compañeros y el abogado principal la consideren como uno más.


Woo Young-woo y el equipo de su extraordinario bufete
Woo Young-woo y el equipo de su extraordinario bufete


Con todo, esta consideración, socialmente no la nota Woo Young-woo provocando que, en varias ocasiones, la joven abogada se replantee su vida laboral. Por suerte para ella, no solo su vida laboral ha dado un vuelco con su al bufete Hanbada ya que, con el paso de los días empieza a descubrir un sentimiento para ella nuevo, provocado por su acercamiento al joven asistente Lee Joon-jo (Kang Tae-oh), un joven agradable, dulce y porque no decirlo, guapo.

Mientras, capítulo a capítulo se va enfrentando a varios juicios (con distinto resultado final) y sus respectivas investigaciones, Woo Young-woo irá descubriendo, igualmente, muchos puntos de su vida que, hasta el momento desconocía. Os hablamos de, el motivo de su acceso a Hanbada, quién es su madre biológica y por qué no está con ella y su padre, etc.

Técnicamente, "Woo, una abogada extraordinaria” es una serie realmente muy completa, llevando a la vez dos líneas argumentales, la general que nos narra la vida de los personajes, sus vivencias, sus problemas, sus ansias de evolucionar y en el caso de Woo, sus traumas con la aceptación social de su enfermedad, y después una subtrama que concluye en cada episodio y que incluye tanto la investigación de un caso concreto y su correspondiente juicio.

Sí que es verdad que, en ocasiones, el ritmo es lento, tirando a casino, aunque nunca aburrido, más que nada porque, al poco de ralentizarse, siempre hay una broma para arrancarte una sonrisa o una de las grandes frases de Woo (o alguno de sus compañeros) que te dan un bofetón y te hacen reflexionar o buscar un pañuelo para secarte las lágrimas.

Nos ha gustado mucho también de “Woo, una abogada extraordinaria”, su gran trabajo de ambientación ya que, capítulo a capítulo nos ha ido mostrando varios puntos de la geografía de Corea del Sur mientras nos contaba, encubiertamente, la forma de pensar de la sociedad coreana (frente a la homosexualidad, a los enfermos de TEA, a la vida, etc.) y su forma de vivir (muy volcada al trabajo).

Quizá, lo más criticable de “Woo, una abogada extraordinaria” es, y no recae sobre la propia serie, si no sobre Netflix, la plataforma que la emite a nivel internacional, es la no traducción al español (sólo se ha traducido al español internacional o mexicano).

Interpretativamente nos quitamos el sombrero ante el gran trabajo de Park Eun-bin quien consigue hacernos ver y casi sentir lo que tiene que sentir una persona con trastorno del espectro autista, emocionándonos, haciéndonos perder los nervios con su asocialidad y su interés por hablar de ballenas (su válvula de escape ante la vida que no controla) y a la vez haciéndose querer. El resto de intérpretes, la verdad es que también nos han gustado mucho. Muy buenos trabajos.

Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “Woo, una abogada extraordinaria” es de un 8.5 sobre 10.



Título original: “Extraordinary Attorney Woo” – Corea – 2022
Género: Drama, Comedia
Año de creación: 2022
Año de finalización: 2022 (primera temporada)
Capítulos: 16 de unos 70 minutos.

lunes, 3 de octubre de 2022

La teoría del todo

La teoría del todo - Cartel
La historia de la humanidad nos ha dado grandísimos personajes, desde científicos como Isaac Newton o Albert Einstein hasta fundadores de religiones como Buda o Jesucristo pasando por filósofos como Karl Marx, Aristóteles. Todos ellos grandes influyentes que, de una manera u otra han conseguido marcar y dejar su rastro.

Quizá no en este grupo, pero seguramente si os hablamos de Stephen Hawking, casi todo el mundo lo sabrá ubicar, ya sea por sus estudios sobre el origen del universo como por su imagen de un señor débil prostrado en una silla de ruedas eléctrica que le ayudaba tanto a moverse como a comunicarse.

Como gran personaje reciente, en 2014 llegó a nuestras pantallas la adaptación de un libro de memorias escrito por Jane Hawking en el que se narraba una parte de la vida del célebre físico Stephen Hawking, se tituló “La teoría del todo” y hoy, en este rincón os contaremos nuestra visión sobre ella.

“La teoría del todo” empieza presentándonos a un joven Stephen Hawking (interpretado por Eddie Redmayne), un estudiante británico de cosmología quien, un poco contra su voluntad va a una fiesta junto a un compañero suyo en la facultad. Aunque apenas tiene dotes para la socialización, en la fiesta Stephen conoce a una joven, Jane Wilde (Felicity Jones).

Contra todo lo que pudieran pensar sus amigos, Jane y Stephen empiezan una amistad que, muy pronto se convierte en un compromiso de boda. Por el camino, y mientras Stephen continua con sus estudios, empieza a notar ciertas debilidades en sus extremidades que impiden que estas actúen como deberían.

Poco tiempo después, mientras sale de la facultad, Stephen empieza a no controlar sus pies y cruzándolos involuntariamente y cayendo al suelo y recibiendo un gran golpe en la cabeza. Durante su estancia en el hospital, además de curarle del golpe, le buscan el motivo a su caída y lo encuentran en una enfermedad neuromuscular degenerativa, la ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica). El pronóstico no puede ser más desolador, le quedan 2 años de vida.

Pese a la pésima noticia, Jane le dice que le ama y que quiere casarse con él y pasar juntos todo el tiempo que le quede. Ambos, Jane y Stephen se casan y muy pronto llegan sus primeros hijos, Lucy y Robert.

Con todo, la enfermedad no tiene freno y aunque los peores pronósticos no se cumplen, sí que, cada día, Stephen está más impedido teniendo la necesidad de desplazarse en silla de ruedas y de depender para casi todo de Jane.

Mientras sus estudios en cosmología continúan a buen ritmo, en casa debe aceptar que Jane busque ayuda, encontrando para ello a Jonathan, el director del coro de la iglesia local. Jonathan ayudará a Robert con clases de piano y poco a poco, a Jane en el cuidado de Stephen.

Al poco tiempo, la simple presencia de Jonathan pone a prueba la consistencia del matrimonio Hawking, ya que visto el estado de Stephen surgen muchas dudas sobre la paternidad de su tercer hijo, Timothy. Cuando Jonathan se entera, se sincera con Jane y ella con él, aunque finalmente deja la casa.


Stephen con sus hijos Lucy y Robert
Stephen con sus hijos Lucy y Robert


Solos de nuevo otra vez, y con la fama de Stephen creciendo a nivel mundial, durante un viaje a Burdeos sufre una neumonía severa requiriendo ser ingresado de urgencia. En el hospital, el único recurso que le dan, es practicarle una traqueotomía dejándolo sin poder hablar permanentemente.

Para paliar esa situación contratan a Elaine Mason, una enfermera que le ayudará a comunicarse, tanto que de nuevo su matrimonio se tambaleará, aunque, como ya os podéis imaginar, aquí dejaremos el desarrollo argumental de “La teoría del todo”.

Técnicamente, no os vamos a engañar, “La teoría del todo” nos ha dejado fríos. Stephen Hawking era un hombre con mucha vida, con una de las mentes más científicas más privilegiadas que se han conocido nunca y, mal que nos pese, no se ha explotado en la película. Sus trabajos en investigación, su eclosión mundial, la defensa de su tesis doctoral, todo queda reducido a la mínima expresión.

También nos ha sorprendido negativamente es el mensaje que nos da “La teoría del todo”, ya que, creemos que sí, que puede tener un claro enfoque positivo (es más, hay que vivir la vida a tope con lo que nos dé), pero en esta película se aplica de una forma que, a nosotros, nos ha descolocado quizá por un guion excesivamente flojo que en muchas ocasiones parecía buscar el buenísmo (por no usar la cursilería) en su discurso. La verdad, “La teoría del todo” nos ha parecido un gran desaprovechamiento.

Interpretativamente es donde “La teoría del todo” brilla por su excelencia, con un Eddie Redmayne espectacular, capaz de hacerse suyo el personaje extraordinario de Stephen Hawking haciéndonos participe de su lucha por la vida, de la superación de la sentencia de muerte que dieron los médicos al ser diagnosticado, y todo con una aureola (a veces excesiva) de positivismo. Sin lugar a dudas, una interpretación excelente. También, para nosotros, es muy positivo el trabajo de Felicity Jones dando vida a otra gran luchadora, Jane Hawking. Muy bien para ella también.

Por todo lo que os hemos contado, y pese a que ”La teoría del todo” se nos ha quedado un poco coja (y porque no decirlo, la vemos excesivamente sobrevalorada por la prensa), nuestra nota final para ella es de un 6.5 sobre 10.



Título original: “The Theory of Everything” – 2014 – Reino Unido
Dirigida por: James Marsh
Duración: 123 minutos
Género: Drama, Biográfico.