martes, 23 de enero de 2024

Dejar el mundo atrás

Dejar el mundo atrás - Cartel
A veces creo que la humanidad ya da por descontado que nos hemos cargado el mundo y que este tiene los días más que contados. Quizá lo único que nos falta saber es la respuesta a dos preguntas relacionadas con ello, ¿Cuándo será el fin del mundo? Y ¿Cómo será el fin del mundo?

Es más que evidente que no lo sabremos nunca de antemano, como mínimo yo espero no saberlo antes de que ocurra, con todo, esta incertidumbre ha supuesto una fuente inagotable de inspiración en el mundo de la literatura y de rebote, en del séptimo arte con títulos como: “Hijos de los hombres”, “28 días después”, “Soy leyenda”, “El día de mañana” o un sinfín de películas de zombis.

La gran fábrica de películas que ha cambiado, o colaborado a cambiar, el mundo de cine, Netflix, no ha querido ser menos lanzando para el pasado final de 2023, una película para la que se hizo con una buena idea, una novela de Rumaan Alam, un buen elenco de actores, Julia Roberts, Ethan Hawke, Kevin Bacon y Mahershala Ali y un buen equipo publicitario, obviamente os estamos hablando de “Dejar el mundo atrás”.

“Dejar el mundo atrás” está dirigida, producida y guionizada por un muy poco prolífico Sam Esmail adaptando la novela homónima de Rumaan Alam.

“Dejar el mundo atrás” empieza presentándonos a Amanda Sandford (a quien da vida Julia Roberts), una mujer de mediana edad que asqueada con la sociedad y la gente que le rodea, de un día para otro decide irse de vacaciones no planificada y de inmediato a Long Island. Para ello, alquila una lujosa casa a través de una plataforma y se lleva su marido Clay (Ethan Hawke) y a sus dos hijos adolescentes, dos adictos a la tecnología.

La llegada a la casa es tranquila, aunque muy pronto empiezan a ver cosas que les preocupan, pierden la conectividad a internet, la cobertura del móvil y, sobre todo, observan cuando están descansando en la playa, como un petrolero sin control encalla en la playa, justo donde ellos tenían sus toallas tendidas.

Esa misma noche, y mientras piensan en lo que han visto ese día, dos desconocidos llaman a la puerta, son George H. Scott (interpretado por Mahershala Ali) y su hija Ruth, los propietarios de casa. Ambos estaban en Nueva York esperando el regreso de un largo viaje de la esposa de Scott cuando el caos por la falta de comunicaciones se ha apoderado de la ciudad.

Después de una negociación Amanda deja que los propietarios se queden en casa en una habitación de sobras. A la mañana siguiente, las sorpresas continúan para todos, Clay intenta ir a la ciudad, pero debe regresar ya que, sin GPS no encuentra el camino, de mientras Amanda descubre extraños mensajes en su móvil y Scott se lleva la peor parte, descubre que sus vecinos han muerto justo cuando a su lado ve estrellarse varios aviones.

En medio de suposiciones conspiranoicas, los Sandford deciden volver a la gran manzana, aunque de camino descubren que lo tendrán muy difícil, por no decir imposible ya que, la carretera está colapsada de coches autónomos (Teslas) chocando unos contra otros. Como consecuencia, regresan a la casa.


Los coches autónomos pierden el control
Los coches autónomos pierden el control



¿Se puede complicar más la cosa? Pues la verdad, un poco más sí, aunque eso, como el final de “Dejar el mundo atrás”, nos lo guardaremos para nosotros.

“Dejar el mundo atrás” lo podríamos definir como a un thriller conspiranoico en un mundo post apocalíptico o en ciernes de serlo. Parte de una idea realmente buena, un apagón tecnológico en plena era de internet, de los smartphones y de la conectividad total, aunque pronto, muy pronto, la película empieza a hacer aguas ayudada por unos movimientos de cámara excesivos y cansinos acompañados de una música ciertamente machacona que nos acompañara mientras se abren puertas y más puertas argumentales en una historia que a veces, parece no avanzar.

Argumentalmente, “Dejar el mundo atrás” intenta crear un thriller y enganchar al espectador con dos únicos recursos: mostrarnos cada dos secuencias un ejemplo catastrofista de que la tecnología ha dejado de funcionar (petroleros que encallan en la playa, aviones cayendo sin remedio, cientos de coche chocando sin control, etc.) y plantearnos alguna que otra reflexión sobre la situación política mundial con toques de racismo entre los miembros de la casa. Desgraciadamente, bajo nuestro punto de vista, nada funciona.

Desde el punto de vista interpretativo, queremos resaltar el gran trabajo de Julia Roberts dando vida a la misántropa Amanda Sandford, una mujer dura quien tras una huida luchará como pocos para salvar a su familia y descubrir lo que está pasando. También nos ha gustado mucho Mahershala Ali dando vida al misterioso George H. Scott. Sin lugar a duda, lo mejor de “Dejar el mundo atrás” es el trabajo de sus dos protagonistas.

Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “Dejar el mundo atrás” es de un 5 sobre 10.





Titulo original: “Leave the world behind” – USA – 2023
Dirigida por: Sam Esmail
Duración: 134 minutos
Género: Ciencia ficción, Thriller
miércoles, 17 de enero de 2024

Reina - Temporada 1

Reina - Poster
Durante los últimos años, uno de los géneros que más han proliferado en los catálogos de la mayoría de las plataformas de streaming es el de los dramas, o comedias relacionadas con el colectivo LGTBI, aunque casi siempre centradas en adolescentes, y sus problemas de aceptación o de LGTB fobia a los que tienen que enfrentarse.

Fuera de este ámbito de institutos y adolescentes, podemos encontrar pequeñas-grandes películas, como “Tierra de Dios”, “Carol”, “Una mujer fantástica”, pero ¿por qué no una serie ambientada en un pequeño pueblo minero de un país que, desgraciadamente, y aun perteneciendo a la UE, el colectivo LGTBI carece de todo tipo de derechos como Polonia?

Pues bien, esta serie existe, y precisamente es una serie polaca la cual, desde su estreno podemos encontrar en Netflix, os hablamos de “Reina”, una miniserie de cuatro capítulos.

“Reina” empieza presentándonos a Sylwester (a quien da vida el veterano Andrzej Seweryn), un prestigioso y famoso sastre afincado en París. Sylwester, además de confeccionar trajes a medida únicos, también se dedica a dos cosas más, y lo hace en un cabaré de Drag Queens donde es quien confecciona los trajes de los y las artistas y a la vez, interpreta a la Drag Queen más famosa del local, la célebre Loretta.

En sus últimos días antes de jubilarse, tanto del mundo de la moda como del de la interpretación, Sylwester le cuenta a su amigo y coreógrafo Corentin (Kova Réaç) su intención de desplazarse a vivir al sur de Francia, con todo, una carta con origen en Polonia rompe sus intenciones.

Después de plantearse si abrir o no la carta, lo hace, descubriendo una parte de la vida de Sylwester ajena a París y al mundo de la moda. La carta es de su nieta, a quien él no conoce, indicándole que Wiola, su madre (e hija de Sylwester) está gravemente enferma y necesita que le sea trasplantado un riñón. Sin pensárselo mucho, Sylwester, abandona su idea de ir al sur de Francia para irse a su pueblo, un pequeño pueblo minero de la Polonia profunda que él, abandonó 40 años atrás.

En el pequeño pueblo minero la situación no es fácil, ya que Wiola no quiere saber nada de él después de más de 40 años de ausencia e Iza, su nieta, de debate entre si hacer público o no su embarazo, sobre todo porque no sabe, a ciencia cierta, quien es el padre, Darek o Marek, dos chicos del pueblo.

Por urgencia, y sin su consentimiento, Wiola debe someterse al trasplante y el único donante compatible es su propio padre. Por suerte para ambos, la intervención es un auténtico éxito, provocando que, al ser dado de alta, Sylwester se instale temporalmente en casa de su hija y nieta.

Sylwester (la reina Loretta) con su nieta
Sylwester (la reina Loretta) con su nieta



La vuelta a casa de Wiola tras su convalecencia resulta ciertamente caótica ya que, debe hacer frente a tres descubrimientos que, de nuevo cambiaran su vida, el primero de ellos, que su hija está embarazada, el segundo que su padre tiene una doble vida, que es gay y que, además, es Drag Queen, y el último y mucho más grave, debe enfrentarse a un accidente en la mina del pueblo que deja atrapados en el pozo a ocho mineros, entre los que están Darek y Marek, los amigos de su hija.

Tras el accidente en el que únicamente de salvó Marek y con Wiola y Sylester mucho más unidos, ambos deciden montar un espectáculo en plan telemaratón para recaudar dinero para las familias de los fallecidos, y hasta aquí, lo que os podemos contar del argumento de “Reina”.

Técnicamente, “Reina” nos sorprende por su planteamiento y su desarrollo, centrado básicamente en la figura de un hombre de éxito a punto de jubilarse, con, aparentemente su vida solucionada, aunque con una sola carta de desmorona para llevarle, 40 años después a su pueblo, del que había huido dejando atrás mujer e hija, a quien apenas llegó a conocer.

A través de un grave problema personal, se irán desgranando, poco a poco, un cúmulo de secretos y rencillas familiares en medio de un ambiente hostil. Lejos a de amedrentarse, y usando escenas emotivas y con cierta carga dramática (tampoco excesiva), la historia nos llevará a través de un sendero de autoaceptación, descubrimiento y lucha por el respeto y amor de los seres queridos.

Interpretativamente nos quitamos el sombrero ante el trabajo de, para nosotros un desconocido, Andrzej Seweryn, quien da vida magistralmente a un hombre que, a lo largo de su vida ha tenido que luchar duramente por llegar a ser quien es, y ahora, a puertas de su jubilación, debe volver a luchar para ser aceptado como es y a la vez, recuperar a una hija que tuvo que abandonar 40 años atrás.

No os vamos a engañar, no es una serie perfecta, ya que, pese a lo innovador de su argumento, y al excelente trabajo de sus intérpretes principales, “Reina” peca en exceso de falta de ritmo, lastrando a veces su buena factura técnica.

Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “Reina” es de un 7 sobre 10.




Título original: “Krolowa”– 2022 – Polonia
Año de creación: 2022
Año de finalización: 2022 (primera y única temporada)
Duración: 4 capítulos (de unos 45 minutos)

lunes, 15 de enero de 2024

La sociedad de la nieve

La sociedad de la nieve - Cartel
El mundo del cine es un mundo que, en ocasiones, parece tremendamente sencillo (sobreexplotando, por ejemplo, las secuelas, precuelas y sucesivas partes indicando así una falta total de imaginación acompañada de una necesidad de llenar las arcas de productoras y distribuidoras) mientras que, en otras ocasiones, las que menos, aparecen cintas que son auténticas obras de arte, originales, potentes y porque no decirlo, inolvidables.

Con todo, hay un punto que ayuda a que una película pase del bloque de películas del montón al de buenas películas sin necesidad de tener una idea realmente original, el guion. Un buen guion es, para nosotros, el punto de partida necesario para conseguir un buen producto cinematográfico, obviamente ayudado por la visión del equipo de dirección con capacidad suficiente para transmitir emociones e implicar al espectador en la historia

Dentro de este grupo de directores, nos encontramos con el barcelonés Juan Antonio Bayona, un hombre que, desde sus inicios como director ha demostrado que es capaz de conectar con el espectador, implicarle y hacerle vibrar, y todo con 5 películas (y 5 éxitos de crítica y de cartelera) en su carrera: “El Orfanato”, “Lo imposible”, “Un monstruo viene a verme”, “Jurassic World: el reino caído” y estreno del pasado 2023, “La sociedad de la nieve”.

Hoy en este rincón queremos hablaros de su, por el momento, última película, “La sociedad de la nieve”, que, aunque para mucho es una actualización de “¡Viven!” de 1993, realmente es la adaptación de la novela homónima de Pablo Vierci sobre el trágico accidente de aviación en los Andes de 1972.

“La sociedad de la nieve” empieza situándonos a comienzos de octubre de 1972 en la capital de Uruguay, Montevideo, donde nos encontramos con los jóvenes integrantes de un equipo de rugby, el “Old Christians Club” quienes en un ambiente de diversión y positivismo tienen la oportunidad de realizar un viaje lleno de expectativas, ir a Santiago de Chile. Llenos de emoción, los 19 integrantes del equipo y 20 de sus familiares y amigos, el 13 de octubre de 1972 se montan en un pequeño avión e inician el viaje.

A las pocas horas de vuelo y mientras los viajeros se divierten en el avión, este entra en una zona de altas turbulencias provocadas por una potente tormenta cruzando la cordillera de los Andes. Cuando parece que la tripulación ha sido capaz de salir de la tormenta, el avión sufre un espectacular accidente debido a la baja altura que lleva y la altitud de las montañas.

Sin apenas darse cuenta, el avión se parte en dos provocando la muerte instantánea de muchos de sus ocupantes y dejando al resto en medio de un cono de montañas con, lo que queda del fuselaje del avión, medio cubierto de nieve.

Cuando los supervivientes consiguen salir del fuselaje muy pronto se dan cuenta de la magnitud de la tragedia, están completamente aislados del mundo, en la cima de los Andes, rodeados de nieve, de hielo y sin posibilidad de poder comunicarse con el mundo.

Tras las primeras horas en la nieve, el grupo decide prepararse para pasar la noche a temperaturas gélidas, sacan los cadáveres y todas las piezas (sillas, hierros, maletas, etc.) del fuselaje del avión que pueden generar problemas, se hacen con las piezas de ropa que pueden de los equipajes y juntan, para racionar, la poca comida que encuentran.

Al segundo día, ven un avión de rescate, pero pese a sus intentos desesperados, no los ven. Al tercer día, la comida se les acaba y empiezan las cábalas de cuánto tiempo podrán durar solos, en medio de la nieve y sin comida.

Días después y tras alguna tormenta de nieve, parte del grupo empieza a plantear la posibilidad de comer carne humana, sí, caer en el canibalismo para tener alguna opción más de sobrevivir haciendo saltar las alarmas de varios de los integrantes del grupo. Al final, y tras un largo debate, la mayoría de los supervivientes aceptan ceder su cuerpo al resto cuando mueran dando así carta blanca a una opción más de supervivencia.


Luchadores y supervivientes de "La sociedad de la nieve"
Luchadores y supervivientes de "La sociedad de la nieve"



Los siguientes días, varios miembros de la expedición mueren, ya sea por el frío, por lesiones o por enfermedades dando así la opción al resto a poder comer sus cuerpos, cosa que la mayoría hacen. Esta situación provoca que, un grupo de jóvenes decida hacer una expedición para buscar el fuselaje de la cola del avión, pero no lo encuentran a la primera y cuando lo hacen, comprueban que los viajeros que estaban en la cola han muerto, por tanto, deciden llevarse de allí la batería del avión y la radio.

Nuevas ventiscas, tormentas y accidentes merman rápidamente, y el paso del tiempo, no ayuda en nada. Cuando llevan ya casi dos meses perdidos en la montaña, un grupo de tres supervivientes deciden abandonar el grupo y cruzar las montañas en busca de ayuda ¿tendrán éxito en su misión? Como es obvio, nosotros sabemos la respuesta, y quien conozca la historia, también, pero no os lo contaremos por aquí.

“La sociedad de la nieve” supone varios retos importantes para su equipo de desarrollo, el primero crear una obra que en todo momento será comparada con un clásico de la supervivencia “¡Viven!”, una película ambientada en el mismo accidente de los Andes. El segundo, replicar el enfoque que da el autor de libro resaltando, por encima de la crueldad del accidente, los actos de coraje, de solidaridad y reflexión vital a los que los accidentados deben enfrentarse. Tercero, conseguir una escenografía y una fotografía que nos lleven a la alta montaña, haciéndonos sentir que estamos pasando frío en los Andes (aunque se haya grabado, parcialmente, en Sierra Nevada).

Uno de los grandes aciertos de “La sociedad de la nieve” es la forma como Bayona y su equipo transmite al espectador el estado de ánimo (cómo pasan de la alegría al miedo, o de este a la profunda desesperación por su supervivencia) de los accidentados con unas transiciones que nos ponen los pelos de punta con la ayuda de las imágenes, la música, etc. Sin lugar a duda, realismo casi en estado puro.

Muchos pensarán en el amarillismo para conseguir el realismo, como se ha visto en muchas películas, pero nada más lejos de la realidad, Bayona y su equipo se centran en transmitir las emociones, los dilemas a los que se enfrentan los accidentados, su agonía y todo, sin caer en imágenes truculentas o sangre e higadillos.

Otro de los grandes aciertos de “La sociedad de la nieve” es la elección de su reparto consiguiendo, todos ellos, conmovernos con su realismo, se nota y mucho que todos han estado en contacto con los supervivientes del accidente, sobre todo por la forma que nos transmiten el drama y el espíritu de resiliencia que tuvieron que crear para sobrevivir o luchar por ello. Sin lugar a duda, un acierto total.

Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “La sociedad de la nieve” es de un 8.5 sobre 10.





Título original: “La sociedad de la nieve” – España – 2023
Dirigida por: Juan Antonio Bayona
Duración: 144 minutos
Género: Drama, Supervivencia, Aventuras
lunes, 8 de enero de 2024

El renacido

El renacido - The revenant
Son muchas las páginas de internet y revistas que, regularmente nos preguntan por el actor o actriz que no tiene una película mala y siempre, nos viene a la cabeza un nombre que, aunque es mentira, como todos los actores, tiene cintas malas y menos buenas, el del californiano Leonardo DiCaprio.

Aunque es verdad que la mayoría de sus películas son auténticos éxitos tanto por taquilla como por interpretaciones, tiene también sus ovejas negras, pero una cosa hay que asumirle, sus interpretaciones son como el buen vino, mejora con los años, y en la mayoría de sus trabajos, estos aportan un plus a las películas en las que interviene (por ejemplo: “El lobo de Wall Street”, “Shutter Island”, “Origen” o “Atrápame si puedes”).

Hoy en este rincón os hablaremos de uno de sus últimos grandes éxitos, la película del mexicano Alejandro González Iñárritu por la cual consiguió su primer y ansiado Oscar de la academia de Hollywood, obviamente os estamos hablando de la cinta “El renacido”.

“El renacido” empieza desplazándonos a un ya lejano 1823, en unos aún no definidos estados de Montana y Dakota del Sur. Allí nos encontramos con Hugh Glass (a quien da vida Leonardo DiCaprio), el guía de un nutrido grupo de tramperos que se dedican a la caza de grandes mamíferos para recuperar sus pieles entre las tierras de varias tribus indias.

Un día, el campamento donde está el equipo de Glass capitaneado por el Capitán Andrew Henry es atacado por un grupo de indios haciendo una gran masacre y provocando que un reducido grupo de tramperos y el capitán salgan huyendo con algunos fardos de pieles río abajo. Con todo, pronto deciden abandonar el barco, pues el río es un territorio controlado por los indios.

Una vez abandonado el barco y enterrada parte de las pieles, el grupo inicia una dura travesía por la montaña, aunque a las primeras de cambio, Glass es brutalmente atacado por un inmenso oso grizzly y aunque el animal muere, él resulta gravemente herido. Desde el primer momento, el capitán Henry hace lo posible por llevarse con ellos al moribundo guía, pero la dureza del camino y del invierno hace que tenga que replantearse esta opción.

Después de una dura discusión, Henry decide abandonar a Glass, dejando a su cuidado hasta que muera al hijo del propio Glass (Hawk un mestizo de indio con americano), su amigo, el joven Bridger (Will Poulter) y al exmilitar y mercenario Fitzgerald (Tom Hardy) quien acepta el encargo a cambio de 300 dólares de la época.

Pese al compromiso adquirido por Fitzgerald de cuidar a Glass y darle sepultura cuando muera, no pasa mucho tiempo antes de que cambie de opinión y un día, mientras Bridger está en el río, mata a Hawk ante la impotente mirada de Glass. Después de esto, esconde el cuerpo del joven mestizo y convence a Bridger que los indios están cerca, por tanto, ya que Glass no da señales evidentes de vida, es mejor sepultarlo y marcharse.

Glass (Leonardo DiCaprio) siendo atacado por un oso grizzly
Glass (Leonardo DiCaprio) siendo atacado por un oso grizzly 



A regañadientes y sin cumplir con la sepultura, Glass es abandonado a su suerte, malherido y con una pierna rota. Como puede y empujado tanto por la sed de vengar la muerte de su hijo como por su afán de seguir con vida, aunque la muerte le ronde, poco a poco, arrastrándose primero y comiendo los restos que encuentra en su camino, va recuperándose poco a poco.

Durante su camino de recuperación y en busca de venganza, Glass deberá luchar contra el frío y el duro invierno, contra la hostilidad de los indígenas y el resto de los cazadores, solo con la ayuda de un indio que se cruzará en su camino y de su gran espíritu de supervivencia.

Con todo, ¿creéis que conseguirá Glass sobrevivir a sus mortales heridas? Y si lo hace, ¿logrará dar con Fitzgerald para vengar el asesinato de su hijo? Pues, como ya os podéis imaginar, la respuesta a estas preguntas, aunque las conocemos, no la encontraréis aquí.

Técnicamente os diremos que “El renacido” es una película excepcional, tanto desde el punto de vista de la dirección, como de la escenografía como la interpretación de su protagonista, y eso que se centra en contarnos, en cierta manera, la historia real de Hugh Class haciéndolo además de forma sencilla y sin florituras argumentales.

Iñárritu y su equipo han conseguido con su “El renacido” transmitirnos una auténtica experiencia vital activándonos todos los sentidos ya que consigue desde el minuto uno mantenernos pegado ante la pantalla, haciéndonos congelar de frío, morirnos de hambre, escondernos de depredadores y en cierta manera convertirnos en salvajes para sobrevivir empatizando en cada secuencia con Glass. Y todo sin olvidar la dura crítica hacia la colonización y explotación haciéndonos pensar, una vez más, en quien era realmente el salvaje en esa época.

Como ya os hemos dicho, y queremos repetir, excelente la escenografía y el montaje, ambos 100% realista que consigue hacernos sentir que estamos allí, en medio de la masacre, congelados de frío bajo la nieve en un paisaje, mal sabe decirnos, majestuoso. Sin lugar a duda, una mezcla memorable de belleza con violencia y horror.

Interpretativamente hablando, tenemos que quitarnos el sombrero ante el asombroso y genial trabajo de Leonardo DiCaprio dando vida al explorador y guía de tramperos Hugh Glass y mostrándonos un gran instinto de supervivencia y su necesidad de venganza. DiCaprio tiene todo el espacio del mundo para lucirse y lo hace, y eso que, en esta ocasión, el guion que tiene no podemos decir que apueste por su lucimiento (gran parte de la película no puede hablar, solo hacer sonidos guturales). En cuanto al resto de reparto, bien Hardy dando vida a Fitzgerald, y normales, tirando a más flojos el resto.

Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “El Renacido” es de un 8.5 sobre 10.





Título original: “The revenant” – 2015 – USA
Dirigida por: Alejandro González Iñárritu
Duración: 156 minutos
Género: Aventuras, Western, Drama, Supervivencia