lunes, 30 de noviembre de 2015

Minority Report


Minority Report - Cartel
La gente que no tenemos un género cinematográfico preferido acostumbramos a tener la extraña sensación de que, de vez en cuando, una película en teoría comercial del montón (de esas que están ideadas parar conseguir el máximo posible de recaudación en taquilla) se queda en nuestra memoria de forma casi inexplicable. A los del equipo nos sucedió esto, por separado y por motivos muy dispares con “Minority Report” de Steven Spielberg.

Después de unas cuantas entradas haciendo un pequeño resumen de algunos clásicos recientes de la historia del cine que los del equipo teníamos en nuestra DVDteca particular (“Forrest Gump”, “La milla verde” y “El indomable Will Hunting”) le llega el turno a esta rara avis de 2002 titulada “Minority Report”.

La historia empieza situándonos en el Washington de un futuro cada vez más cercano, en el año 2054. Allí nos encontramos con una ciudad muy distinta a la actual donde las drogas de diseño están al orden del día, y la tecnología punta ha llegado a todos los actos y rincones que rodean al ser humano.

En ese mundo tan evolucionado nos encontramos a John Anderton (interpretado por Tom Cruise), el capitán del grupo de PreCrimen de la policía de Washington. Este grupo centra su actividad en la prevención del crimen aprovechándose de los dotes predictivos de tres mutantes llamados “Precognitivos”, dos chicos gemelos y una chica. El éxito de este sistema es incontestable, ya que con él se ha conseguido anular casi al completo la tasa de criminalidad de la ciudad, permitiendo a la policía adelantarse a los hechos delictivos antes de que sucedan.

Visto el éxito del programa, el director de PreCrimen decide implantarloen todo el país. Para que dicha implantación sea autorizada, el departamento de justicia envía a uno de sus hombres clave, Danny Witwer (interpretado por Colin Farrell) para que inspeccione el sistema y de su visto bueno. Justo el día que estaba en las instalaciones de PreCrimen, los “Precognitivos” envían al sistema un conjunto de imágenes inconexas de un asesinato que se producirá 36 horas después.

Al ver las imágenes Anderton queda desconcertado ya que, aunque no conoce al asesinado (Leo Crow), sí que identifica al asesino, él mismo. Cuando se da cuenta del lío en que se ha metido, huye de PreCrimen para investigar que puede estar pasando. La primera parada la hará en casa de la creadora de PreCrimen, quien le explicará que a veces los tres precognitivos no están de acuerdo en sus predicciones, generando así un “informe en minoría”.

Para intentar salvar su reputación, escaparse de la persecución de PreCrimen y de paso librarse del sabueso Witwer, Anderton secuestra a Agatha (una de las precog) aprovechándose así del hecho que los precognitivos no pueden hacer su trabajo y para obtener, a la vez, toda la información contenida en la memoria de Agatha. ¿Conseguirá escapar de sus perseguidores? Nosotros lo sabemos, pero ya sabéis que, en este rincón no encontraréis la respuesta. Lo que sí encontraréis es nuestra valoración técnica.

Lo primero que remarcaremos es el trabajo de Steven Spielberg, uno de los pocos directores incapaz de dejar indiferente a nadie, quien consigue usar todas las escenas de la película para desplegar todo su potencial y conocimiento tecnológico que, mezclado con un trepidante ritmo consigue en todo momento sorprender al espectador y dejarlo enganchado ante la pantalla durante gran parte del metraje de “Minority Report”, lamentablemente la intención de conseguir giros y sorpresas argumentales acaban estropeando la magia conseguida con la tecnología y el ritmo.

Interpretativamente, muy pocas alegrías, más que nada porqué tanto su protagonista Tom Cruise como el secundario de lujo, Colin Farrell están más bien apáticos o simplemente cumplen con su cometido, sin trasmitir demasiado ni aportar nada a sus personajes.

Para nosotros, “Minority report” se trata de una buena cinta de ciencia ficción que aprovecha las dotes en la materia de Steven Spielberg para crear un buen entretenimiento, pero que a la vez, se queda a las puertas de haber conseguido ser una obra que traspasara los límites del cine comercial. Por nuestra parte, un 6 sobre 10, y la recomendación de verla alguna velada con amigos aprovechando que a menudo la echan por alguno de los múltiples canales de televisión.




Título original: “Minority report” – USA - 2002
Dirigida por: Steven Spielberg
Duración: 144 minutos
Género: Ciencia ficción, acción
sábado, 21 de noviembre de 2015

Infiltrados en clase


Infiltrados en clase - Cartel
Hay momentos en nuestras vidas en los que la presión, el estrés y el no parar son nuestros particulares e incómodos compañeros de viaje, siendo la mejor opción para aligerar carga poner un pie en el suelo y acomodarse en el sofá para ver una película divertida con la que abstraerse de todo. Nosotros así lo pusimos en práctica hace poco, con la comedia “Infiltrados en clase” con Jonah Hill y Channing Tatum.

La historia empieza con un flashback para presentarnos a los dos protagonistas de la historia en su último año de instituto, el guaperas y exitoso Jenko (Channing Tatum) y el regordete e inteligente Schmidt (Jonah Hill).

Siete años después, Jenko y Schmidt vuelven a cruzar sus vidas, en esta ocasión en la academia de policía donde, al revés que en su época de instituto, deciden aliarse para aprovechar al máximo sus particulares peculiaridades, es decir, la fuerza y destreza física de Jenko y la capacidad de estudio de Schmidt, creando así un vínculo especial entre ambos que se extenderá más allá de su licenciamiento.

Como su primera acción policiaca acaba con un auténtico fracaso, nuestros protagonistas son enviados a un destino especial, la comisaría “21 Jump Street” donde se les asignará una misión a su altura: infiltrarse en un instituto para impedir que una peligrosa nueva droga llegue a distribuirse en la calle.

Para no levantar sospechas, Jenko pasa a llamarse Brad y Schmidt, Doug. Lo que ya no pueden controlar es el error que provoca que Brad tenga que asistir a las clases más duras, mientras que Doug pueda dedicarse a lucirse. O sea, el mundo al revés, quien siempre había sufrido ahora le toca ser popular, mientras que el popular acaba juntándose con el grupo de nerds de física.

No pasan muchos días y entran en contacto con Erick (Dave Franco), el camello del instituto, quien les dejará probar la nueva droga. Como quieren desarticular la red entera, planean usar a Erick para llegar al distribuidor, pero todo esto, entre fiestas, orgías y malentendidos, se les complicará un poco, por tanto, os recomendamos hacer un hueco para ver y disfrutar de “Infiltrados en clase”.

Técnicamente estamos ante una película que como todo el mundo puede esperar, se encuadra como la típica comedia adolescente gamberra protagonizada por dos caras conocidas de Hollywood con algunos cameos (entre los que destaca Johnny Deep). La verdad es que no tiene muchas más pretensiones que divertir y hacernos pasar un buen rato, mezclando el género de las comedias adolescentes con el de las comedias policiacas, y la verdad es que cumple a perfección.

En cuanto a las interpretaciones, aunque siempre es difícil valorar una comedia tan sencilla como esta, no os vamos a engañar si os decimos que nos han gustado bastante, sobre todo, las de Hill y Tatum los que, aunque no cuelan como adolescentes, sí que explotan a la perfección una magia entre ellos más fácil de encontrar en los institutos que en el cine actual. Sin lugar a dudas, “Infiltrados en clase” sería bastante más mala y prescindible con otra pareja protagonista.

Con todo, nuestra valoración final es de un 6 sobre 10. Eso sí, os la recomendamos totalmente para esos días en los que apetece tirarse en el sofá, reír un rato y no pensar en nada.





Título original: “21 jump Street” – 2012 – USA
Dirigida por: Philip Lord y Chris Miller
Duración: 109 minutos
Género: comedia, acción