Una odisea, eso es lo
que sufrimos anoche los del equipo para hacernos con nuestras entradas para
disfrutar de la sensación española del momento en nuestras carteleras, “Ocho
apellidos vascos”, y eso que en Vitoria tenemos la desgracia de tener
únicamente dos multicines, pero lo de ayer fue de auténtica traca, ya que, en
su tercer fin de semana en cartelera y con 5 salas emitiendo la película, el
cartel de “agotadas las entradas” se colgó en todas ellas.
Por suerte, y cuando ya
estábamos a punto de desistir, uno de los cines decidió organizar una sesión
golfa extra y claro, evidentemente nos lanzamos, aunque con el miedo
susurrándonos “¿te imaginas que ahora solo sea una mezcla de tópicos sin gracia?”.
La historia empieza en
Sevilla, concretamente en una taberna a orillas del Guadalquivir, allí tres
chicas vascas, vestidas con sus trajes de sevillanas, intentan celebrar lo que
hubiese tenido que ser la despedida de soltera de Amaia (Clara Lago) cuando, en
un momento de la velada, Rafa (Dani Rovira) se sube al escenario para contar
unos chistes sobre vascos, lo cual enerva a una ya molesta Amaia.
Sin quererlo ni
beberlo, Rafa y Amaia acaban en casa del primero, aunque no sucede lo que
estáis pensando, lo que si pasa es que, a la mañana siguiente, Amaia huye hacia
Euskadi dejando olvidado su teléfono, bolso y documentación.
Aunque Rafa no haya
salido nunca de su Sevilla natal, y pese a la oposición de sus amigos, decide
cruzar sus propias fronteras y pone rumbo a ese territorio inhóspito y lleno de
peligros que es Euskadi.
Una vez allí, y gracias
a un desafortunado accidente después de ser rechazado por Amaia, Rafa acaba en
el calabozo esperando que Amaia le rescate. Cuando sucede esto, es porque
nuestra querida protagonista se ve metida en un buen lío, ya que Koldo (Karra
Elejalde) su padre vuelve a casa para conocer al que será su yerno (Antxon).
Como Antxon ya no está
en la vida de Amaia, ésta rescata a Rafa para que simule ser Antxon, solo, eso
sí, hasta el día antes de la supuesta boda.
Ya os podéis imaginar,
un andaluz simulando tener acento vasco y metiéndose de un lío a otro para
intentar convencer a Koldo que él es un buen partido para su hija (desde
pertenecer a la Kale borroka hasta montarse una familia con su nueva amiga
Mertxe-Ane (Carmen Machi) interpretando el papel de madre).
Amaia observa a su padre Koldo y su novio "Antxon"... |
Realmente “Ocho
apellidos vascos” nos ha sorprendido y en positivo, los del equipo teníamos un
miedo atroz a que nos tuviéramos que enfrentar a una hora y media de tópicos
sin sentido, y la verdad, “Ocho apellidos vascos” es una hora y media de
tópicos y estereotipos, pero enfocados desde un punto de vista divertido. No
estuvimos todo el metraje riendo a carcajada limpia, pero sí que nos gustó, nos
divertimos y nos reímos con muchos gags y secuencias.
En cuanto a las
interpretaciones, nos gustaría remarcar especialmente el trabajo de ese “vasco”
de Málaga llamado Dani Rovira, un chico que hasta ahora teníamos relacionado al
“Club de la Comedia”, y en esta “Ocho apellidos vascos” salta a la gran pantalla
con más éxito incluso que en su faceta de monologuista. Sin lugar a dudas, el
mejor descubrimiento de la película. En cuanto al resto de actores, pues sin
sorpresas, una buena Carmen Machi haciendo de madre postiza, un Karra Elejalde
haciendo de padre cascarrabias, aunque a la vez bonachón, todos correctos.
Si que a los del equipo
nos gustaría destacar, como vascos del sur, la excelente fotografía, ubicando
el imaginario pueblo de Argoitia (donde vive Amaia) entre las bellas
localidades gipuzkoanas de Zumaia, Getaria y Leitza.
Sin más, nuestra valoración
es de un 7 sobre 10, mientras quedamos a la espera de la ya anunciada “Ocho
apellidos vascos - 2”, eso sí, cruzando los dedos para que no la destrocen
mucho.
Título original: “Ocho
apellidos vascos” – 2014 – España
Dirigida por: Emilio Martínez
Lázaro
Duración: 98 minutos