Hace unos años, muy pocos
futurólogos se atrevieron a pronosticar el auge del racismo en la sociedad de
la segunda década del segundo milenio. Desgraciadamente, entre todos nos hemos
empeñado en la persistencia de este problema, haciéndose poco a poco la
involución en este campo aún más notoria. Desconocemos si esta problemática
social tiene que ver con lo que ocurre en el cine actualmente no, ya que
últimamente son muchas las cintas que llegan a nuestras carteleras con el
racismo como trasfondo.
Una de estas películas,
nominada además a varias categorías de los premios Oscar, es “Figuras Ocultas”,
una cinta que nos traslada directamente a principios de los años 60 del pasado
siglo, en plena carrera espacial y con la segregación racial en su máxima expresión.
En esa época, los
superordenadores actuales todavía estaban en una fase muy inicial y, para
sustituir su capacidad de cálculo, los grandes organismos estatales, entre los
cuales se encuentra la NASA, reclutaban las mentes más brillantes para trabajar
de ‘calculadoras humanas’. Entre estas calculadoras se encontraban las tres
protagonistas de “Figuras Ocultas”, Katherine (interpretada por Taraji P.
Henson), Dorothy (Octavia Spencer) y Mary Jackson (Janelle Monáe).
Dotadas de una mente
brillante, las tres amigas fueron seleccionadas para colaborar a vencer el
pulso espacial que por esas fechas disputaban americanos y rusos, todo un hito
teniendo en cuenta que las tres eran, además, mujeres afroamericanas.
Contra viento y marea, y
después de superar múltiples vejaciones de sus compañeros (tener que ir a un
baño específico para ellas situado a gran distancia de su oficina, no poder
utilizar las cafeteras de grupo o soportar varios ataques machistas de Paul
Stattford, –Jim Parsons- entre otros), Katherine se gana el respeto de sus
compañeros y de su jefe, Al Harrison (Kevin Costner), pudiendo trabajar codo
con codo con el equipo.
Por otra parte, Dorothy,
avanzándose varios pasos a su superiora, y previendo que su trabajo quedará en
entredicho cuando el primer macro ordenador entre en funcionamiento, toma la determinación de aprender programación
y de formar a todo su grupo de trabajo sin comunicarlo oficialmente a sus
superiores.
Mary Jackson, la tercera
en discordia, toma la determinación de convertirse en ingeniera, aunque para
ello tenga que luchar por cambiar alguna que otra ley que, por el color de su
piel, le impide incluso matricularse en la escuela de ingeniería o asistir a
las mismas clases que los grupos de estudiantes blancos.
Estamos convencidos de que
nadie, o muy pocos de los que nos leéis, sabíais de la existencia de Katherine,
Dorothy y Mary Jackson, así como de su importancia en los inicios de la carrera
espacial entre USA y Rusia, y estamos totalmente seguros que en esta entrada
tampoco lo descubriréis totalmente, aunque sí que os decimos que si vais al
cine, aún estáis a tiempo de descubrirlo en la pantalla grande.
Para nosotros, las
interpretaciones son quizá el punto más fuerte de “Figuras Ocultas”, ya que ni
protagonistas ni secundarios tienen demasiado margen de mejora. En este punto,
tanto Taraji P. Henson, Octavia Spencer, Kevin Costner e incluso Jim Parsons
están realmente brillantes, consiguiendo transmitirnos todas sus sensaciones,
tanto las positivas por sus logros, como el sentimiento de racismo, de
sufrimiento, de machismo… sin más, un sobresaliente para todos ellos.
Argumentalmente “Figuras
Ocultas” nos ha gustado bastante, aunque el desarrollo de la misma (con una
escenografía y ambientación realmente buena) nos transmitió una sensación de
excesiva delicadeza en contar la historia, la cual intuimos que debió ser mucho
más dura de lo que nos mostró Theodore Melfi, el director de la cinta.
Con todo, a nosotros nos
gustó, y le ponemos un notable alto, un 8 sobre 10.
Título original: “Hidden
Figures” – 2016 – USA
Duración: 127 minutos
Dirigida por: Theodore
Melfi
Género: Drama, Racismo,
Histórica
No hay comentarios:
Publicar un comentario