lunes, 26 de abril de 2021

Tres anuncios en las afueras

Tres anuncios en las afueras

Todos conocemos el poder de la publicidad, y no solo para convencernos de que compremos algo que, posiblemente no usaremos nunca, sino también para hacernos pensar o peor, crear corrientes de opinión sobre algo.

Los últimos años, con el poder de internet incrementándose sin parar, miles de jóvenes (la mayoría hijos de famosos sin ganas o capacidad para estudiar) se han convertido en influencers, o lo que es lo mismo, imagen de marcas comerciales que intentan, sin parar, convencernos que compremos para parecernos tan ‘top’ como los influencers.

Os preguntaréis, ¿tienen algo que ver los influencers con la película que nos quieren recomendar? Y os contestamos sin tapujos, no, nada que ver. La película tiene que ver, y como desencadenante de su acción, con la publicidad y su poder para hacernos reaccionar. Hoy, en este pequeño rincón os hablaremos de la cinta de 2017 “Tres anuncios en las afueras”.

La historia de “Tres anuncios en las afueras” nos desplaza a la imaginaria ciudad de Ebbing, Missouri, donde nos encontramos con Mildred Hayes (a quien da vida Frances McDormand), una mujer divorciada que vive con su hijo adolescente Robbie (Lucas Hedges) en una casona en las afueras de la ciudad.

Al poco de presentárnosla descubrimos que Mildred vive atormentada por un acto que ocurrió siete meses antes, la muerte y violación de su hija Angela, un caso sin esclarecer y por el que la policía de Ebbing parece no preocuparse. Un día, volviendo a casa decide alquilar tres grandes vallas publicitarias en las que publica tres frases:

“Violada mientras moría”

“¿Y todavía no hay arrestos”

“¿Cómo es posible jefe Willoughby?”

Como es evidente, la gente del pueblo se molesta, pero Mildred se mantiene firme en su decisión, tanto ante su hijo Robbie como ante el jefe Willoughby (quien además tiene un cáncer terminal), como ante el arrogante y descerebrado oficial Dixon (Sam Rockwell), quien se toma las vallas como una falta a su autoridad.

Poco después de un arrebato de locura que lleva a Dixon a amenazar Red Welby, el arrendador de las vallas, Willoughby detiene a Mildred por una agresión a su dentista, pero un agravamiento de su enfermedad durante el interrogatorio provoca que deje libre a Midred.

La repentina muerte del jefe Willoughby desata la locura de Dixon, quien acaba lanzando por la ventana de su despacho a Red Welby, y todo ante su nuevo jefe quien, sin dudarlo, le despide. Justo esa noche, los tres anuncios son destruidos pasto de las llamas.

Como Mildred sospecha que la policía está detrás de las llamas, les devuelve la jugada, lanzando cócteles Molotov contra la comisaria, quemando accidentalmente a Dixon que estaba en ella.

A partir de este punto, la historia toma un rumbo totalmente inesperado, con una alianza entre Mildred y Dixon la cual, aunque sabemos dónde lleva, nos guardaremos celosamente.


Mildred ante la comisaría de policía de Ebbing
Mildred ante la comisaría de policía de Ebbing


Pocas veces una cinta con un punto de partida tan contundente como sencillo, llega a impactar tanto con el espectador como en esta “Tres anuncios en las afueras”, consiguiendo no solo que uno empatice con sus protagonistas, sino que les entienda y llegue incluso a compartir sus dramas, y eso, que ninguno de sus protagonistas parece estar al 100% en sus cabales.

Dividida en dos claros actos, la trama argumental de “Tres anuncios en las afueras” consigue llevarnos sin tregua, desde las ansias de esclarecer lo sucedido 7 meses atrás de una madre torturada hasta el sorprendente final de la cinta, pasando por la más que previsible reacción de un pueblo ante el ataque a su enfermo jefe de policía. Simplemente, genial.

Interpretativamente, nos quitamos el sobrero ante el soberbio trabajo de sus dos intérpretes principales, Frances McDormand y Sam Rockwell. McDormand realiza un trabajo soberbio, llenando por completo la pantalla, combinando en su papel el profundo drama por la pérdida de su hija, toques de comedia negra y su inquebrantable deber de lucha desde la tristeza, sencillamente, deja a uno con ganas de más. Rockwell, por su parte, encarna a un rudo, racista y homófobo policía totalmente sometido a su desquiciada madre, un personaje por el que nos hace sentir desde el odio más profundo a cierta empatía. Sin lugar a duda, dos interpretaciones memorables.

Por todo lo que os hemos contado, nuestra nota final para “Tres anuncios en las afueras” es de un 8.5 sobre 10.



Título original: “Three billboards outside Ebbing, Missouri” – 2017 – USA
Duración: 112 minutos
Dirigida por: Martin McDonagh
Género: Thriller, Drama

 

 

2 comentarios:

  1. No conocía esta página y me ha encantado, así que me quedo por aquí como seguidora para estar bien informada.
    En casa nos gusta mucho el cine, aunque vayamos poco a las salas la verdad, y esta película es de las que más nos ha gustado últimamente, para mi ver el nombre de Frances McDormand es un reclamo de calidad y no me pierdo ninguna de sus trabajos.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sientete bienvenida por aquí, y con total libertad de comentar. La verdad es que el cine es un pequeño placer que, desgraciadamente este último año se nos ha puesto muy complicado a todos, así que ahora, toca tirar de plataformas :(.
      No te voy a engañar sobre McDormand, totalmente de acuerdo, es una grandísima actriz.

      Eliminar